Para obtener el mayor provecho posible de los nutrientes que ofrecen tus platos y al mismo tiempo, no dejar de disfrutar de sabrosas preparaciones, te recomendamos poner en práctica el siguiente truco saludable: mezcla frutas frescas con frutos secos.
La diferencia de textura así como la frescura de unos y la calidez de otros harán una combinación perfecta y además saludable, pues los frutos secos con sus grasas saludables ayudarán a absorber las vitaminas liposolubles y carotenos de las frutas frescas.
Por otro lado, los ácidos de la fruta fresca mejorarán la absorción del magnesio y el calcio de los frutos secos, así como también, la vitamina C de la fruta fresca nos permitirá aprovechar mejor el hierro que algunos frutos secos nos ofrecen.
Así, esta combinación perfecta de frutas frescas y secas es además de muy sabrosa, una saludable opción para obtener más nutrientes.
Imagen | Francisco Antunes
Ver 5 comentarios