El bisfenol A o BPA, es un disruptor endócrino, es decir, una sustancia que altera el funcionamiento interno del organismo, como ya contamos anteriormente. Se encuentra en productos con revestimiento plástico y se ha vinculado a obesidad en diferentes estudios, pero ahora, se asocia al bisfenol A de los enlatados con mayor presión arterial.
Aunque otras investigaciones han determinado este vínculo, recientemente se realizó un estudio que incluyó a 60 hombres y mujeres de 60 años o más, a los cuáles se les pidió que bebieran leche de soja de botellas de vidrio o de latas.
Dos horas después se corroboró el contenido de bisfenol A en orina y se evaluó la presión arterial y la frecuencia cardíaca en los participantes.
Se observó que el bisfenol A incremento un 1600% en la orina de quienes bebieron enlatados y su presión arterial aumento 5 mmHg. Dado que la leche de soja no incluye ningún componente vinculado a mayor presión arterial, se piensa que simplemente el consumo de bebidas enlatadas es el responsable del incremento.
Aunque la FDA ha señalado que el bisfenol A es seguro para usar en envases de alimentos porque muy poca cantidad pasa al organismo del consumidor, este estudio contradice tal afirmación al observar incrementos significativos y agudos de bisfenol A en orina y mayor presión arterial asociada.
Entonces, sólo podemos pensar que el bisfenol A, como otros disruptores endócrinos, no es tan inofensivo como se piensa, sobre todo, por su extendida presencia en muchos alimentos envasados o procesados que predominan en la actualidad y que por lo tanto, acercan esta sustancia a nuestra dieta.
Independientemente del alimento que sea, la recomendación sería evitar envases plásticos o enlatados cuyo revestimiento puede tener bisfenol A, si queremos prevenir el aumento de la presión arterial y otras consecuencias negativas que esta sustancia puede producir en nuestro cuerpo.
Vía | Hypertension
En Vitónica | Tu bidón de agua puede favorecer la acumulación de grasa en tu cuerpo
En Vitónica | Cuidado con esas botellas
Imagen | Thinkstock
Ver 4 comentarios
4 comentarios
Juancamina
Que interesante Gabriela...Al fin volveremos de a poco al vidrio y a los retornables lo que ayudará mucho al cuidado del medio ambiente. Y por lo visto a nuestra salud. Abrazo Juanca.
gobelins
ohhhhh y los que comemos atún enlatado casi todoos los dias
selek9
Jajajajajajaja
Si te lees realmente el estudio fuera del abstract ves que es un estudio muy muy muy muy pobre.
Por ejemplo, dicen que aumenta la tensión 4mmHg!! Es decir que si tienes 120 pasas a tener 124. Una diferencia totalmente despreciable.
Segundo, atendiendo al mismo estudio el bisfenol A baja la tensión, el estudio se contradice a si mismo.
Tercero, en una lata hay 8 nanogramos de bisfenol, si te tomas 2 latas tendrás 16 nanogramos. Se sabe que el bisfenol se acumula en la grasa y tarda en desaparecer, pues los participantes del estudio a las 2 horas tenían 17 nanogramos de bisfenol!!! ¿Cómo es esto posible?
Vamos que el estudio hace aguas por todas partes. Desde luego Gabriela me has decepcionado, esperaba más de ti.
La agencia europea de seguridad alimentaria considera que la cantidad máxima de bisfenol al día no debe superar 3,5 miligramos, por debajo lo considera seguro. Se te ha olvidado hacer referencia a eso en el artículo...