Me gusta comer, ¡esa es la pura realidad! Para mi la comida, además de alimentar y de nutrir mi cuerpo, es un acto hedonista, un placer instantáneo del que casi siempre me arrepiento luego pues, a la larga, voy engordando.
Lo mío no es un acto compulsivo, ni automático, es más bien algo adictivo. No es que coma sin parar, por estrés o ansiedad, sino que como cinco veces al día (desayuno, un tentempié sobre las 12,00 h, la comida, una merienda a las 17,30 h, y la cena), cuando la triste realidad es que no hago nada de ejercicio, pues me paso la mayor parte del día sentada frente al ordenador, ya que trabajo desde casa.
Cuando estoy concentrada, distraída u ocupada se me pasan las horas volando, y ni me acuerdo de la comida, pero al no tener a nadie cerca con quien poder interactuar es como si necesitase esas pausas, que me proporciona el parar para comer, para que el día no se me haga eterno. Digamos que la comida me provoca un rápido alivio frente a las frustraciones diarias.
El desborde y la falta de equilibrio son los aspectos que estoy intentando aprender a corregir y modificar, Me he dado cuenta de que si quiero adelgazar, es importante dejar de sentir que la vida es un transcurrir entre comidas. No se trata sólo de comer menos, sino de hacer algo agradable en lugar de comer.
Lo ideal sería poder cortar por lo sano, como cuando decidí dejar de fumar, pero como no puedo dejar de comer del todo, tengo que mantener una relación más adulta con la comida, encontrando la medida justa.
No penséis que me está resultando fácil porque para mi familia y mis amigos el conocer restaurantes nuevos, probar nuevas comidas o celebrar las cosas alrededor de la mesa es una costumbre y una forma de vida.
Me he dado cuenta de que hay ciertos alimentos que generan en mi una gran dependencia, y estos son los hidratos de carbono. Intento justificarme a mi misma diciéndome que es mucho más fácil y rápido cocinar pasta, arroz y patatas que carne (que cada día me gusta menos), y que resultan infinitamente más económicos que el pescado (que me encanta).

Ocuparme en vez de preocuparme
Eso de querer adelgazar y no poder frustra muchísimo. Conociéndome y sabiendo lo soberbia que soy, me he propuesto hacer como hice con el tabaco. Cortar de forma drástica. ¡Ya veremos si soy capaz de luchar contra la tentación, y el aburrimiento propios de un plan de acción a largo plazo!
Existen alimentos imprescindibles para ganar en salud y perder kilos. Al igual que hay alimentos muy calóricos que solemos restringir en la dieta, hay otros alimentos con muy pocas calorías, perfectos para ganar salud y perder kilos. Casi todos estos alimentos son verduras, frutas y hortalizas cuyo secreto no es otro que estar constituidos básicamente por agua y micronutrientes como los espárragos, champiñones, pimientos, berenjenas, lechuga, zanahoria o el pepino.
No se si os habréis fijado pero la gente más longeva suele ser la más delgada porque siguen una dieta basada casi exclusivamente en frutas, verduras y legumbres, con muy poca cantidad de carne o pescado. ¡Vamos, la famosa dieta mediterránea de toda la vida! También me he dado cuenta de que como de forma atropellada, con ansiedad, por lo que me he propuesto comer despacio y masticar bien los alimentos.
Me he dado cuenta de que puedo vivir perfectament sin tomar tanto producto lácteo porque además de engordar, los actuales procesos de pasteurización y homogeización destruyen nutrientes como enzimas, vitaminas y proteínas. El calcio, tan importante para los huesos, lo podemos obtener de la coliflor, el brócoli, o el kiwi.
La Organización Mundial de la Salud recomienda consumir 70 gr de azúcar al día, porque la energía que proporciona es necesaria para el buen funcionamiento de nuestro cerebro, sistema nervioso y glóbulos rojos. Pero, hace poco leí que en la actualidad consumimos más azúcar en un día que nuestros antepasados en un año. Me parece un poco exagerado, pero sí que es verdad que cuanta más azúcar se consume, más resistente se hace el cuerpo a la insulina, y más posibilidades existen de que se pueda producir una diabetes del tipo dos.
La fruta nos puede proporcionar azúcares simples como la fructosa, sacarosa y glucosa; carbohidratos de fácil digestión y rápida absorción. El valor calórico vendrá determinado por su concentración en azúcares, pero la mayoría de las frutas son hipocalóricas con respecto a su peso.
Después de hacer examen de conciencia, me he dado cuenta de que con demasiada frecuencia sustituía la fruta de postre por productos lácteos. Esto es algo que sólo se puede hacer excepcionalmente en ocasiones especiales.
Adquirir buenos hábitos
He notado que si paro veinte minutos de trabajar para salir a andar, hago mejor la digestión, quemo unas cuantas calorías y me siento mucho mejor física y mentalmente.
He leído hasta la saciedad que lo aconsejable es beber 2 litros de agua diarios, pero como me cuesta horrores, los tomo en forma de infusiones. El té verde por ejemplo, me quita la sensación de hambre. Ahora estoy intentando tomarme un vaso de agua natural nada más levantarme, pero casi siempre acabo preparándome una taza de té. Lo tomo sin leche ni azúcar. Una vez que te acostumbras, el té con azúcar acaba sabiéndote a jarabe.
A la hora de cocinar carnes y pescados, lo hago siempre al vapor con un práctico molde de silicona, que se mete en el microondas, y que los tiene listos en 4 minutos. Los suelo macerar con limón y especias para darles sabor. Antes de comerlo, los aliño con unas gotitas de aceite de oliva en crudo. ¡Sólo unas gotitas!
Os parecerá una tontería, pero desde que he decidido coger al toro por los cuernos y enfrentarme con todo lo que hacía que engordase me siento mucho mejor. Todavía tengo que perder varios kilos, pero mi autoestima está mejor que nunca. Noto que, esta vez, voy por el buen camino. ¡Ojalá mi testimonio sirva para animaros si también estáis intentando adelgazar!
En el Espacio Cuídate Mucho:
- ¿De verdad sabes controlar el colesterol, la tensión y los triglicéridos?
- Salud en el trabajo, ¿qué alimentos me llevo a trabajar?
- Salud en el trabajo: prevención de lesiones por el uso de móviles y teclados
Más información | Espacio Cuidate Mucho Más información | DKV Seguros Fotos | @PeggyGreb,@Cuatroasteriscos
Ver 2 comentarios
2 comentarios
lhaydee
hola guapa.
Voy a dejar una opinión, e insisto es opinión y un estilo de vida que intento practicar.
Yo no necesito adelgazar, diría más bien engordar (en el pasado decidi adelgazar y me pasé de la raya).
Pero en mis hábitos que aprendí y que siempre he llevado a la práctica es DIETA EQUILIBRDA. Buena ración de hidratos (arroces integrales, pastas, quinoa, patatas...esos 70/ 80 gr de arroz o lo que viene a ser media tazsa a ojo porque me niego a MEDIR es una obsesión insana) buena ración de proteínas y su buena ración de vegetales. Y por supuestos GRASAS!!, de las buenas. Del aguacate, de los frutos secos, del aceite de oliva, del coco, del cacao...Mi ración de 10/20 gr de grasas en cada comida no me las quita nadie. Y sí has oido bien, cada comida tiene al menos 10 gr o lo que viene a ser un puñain de frutos secos, o medio aguacate medio o una cucharadita de tahini...
Y eso en cada comida, y oye...como una vez no coma mis hidratos, mis grasas (que aportan mucha palatabilidad y aportan una gran saciedad) y por supuesto mis verdes y mis protes me quedo con hambre y vienen las ansiedades...
Y así adelgacé...casi diez kilos.
Y sigo con esa dieta
Como por intuición y lo que creo que me sacia
No cuento calorías
No mido alimentos
Me guío por porciones visuales
Como de todo
Ole por los hidratos que siempre los demonizan en las páginas web y en la tele
Olé por las buenas grasas
Y olé por nutrir tu cuerpo. Buen combustible para estar sanos
Que tengas un buen día y ánimo con el cambio de hábitos!
marga302
Yo por el momento he empezado yendo al gimnasio, a ver si ahora me pongo las pilas con la dieta....