Si hay algo que no deja de emocionarnos cada vez que ocurre es la inauguración de los Juegos Olímpicos. Este año, después de haber tenido que aplazarlos, por fin estamos asistiendo a la inauguración de los Juegos 2020 en Tokyo.
Sin duda tanto los anillos olímpicos como la antorcha son los elementos más especiales y distintivos de cualquier inauguración y, este año, estos anillos tienen una historia preciosa y simbólica detrás.
Y es que la particularidad de los anillos que decoran el Estadio Olímpico es que, a diferencia de lo que estamos acostumbrados, están elaborados en madera y no están pintados de los tradicionales colores, sino que se han mantenido con su color a madera natural.
¿A qué se debe esto? Pues la historia detrás es muy especial. Y es que, en los últimos Juegos celebrados en Tokyo, en el año 1964, los atletas internacionales llevaron diferentes semillas con las que se plantaron árboles en la ciudad japonesa.
Cincuenta y siete años después, la madera proveniente de esos árboles ha sido la que han servido a los trabajadores de la madera japoneses para poder tallar los actuales anillos olímpicos. Esto representa la unión existente entre los diferentes países durante la celebración de los Juegos Olímpicos. Algo especialmente simbólico e importante este año en el que todos hemos sufrido tanto.
Y es que, como indican en el perfil oficial de los Juegos Olímpicos en Instagram, somos más fuertes cuando estamos juntos.
¿Qué os parece este detalle? A nosotros no ha podido gustarnos más.
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Imágenes | Olympic Games
