La depilación láser ha ganado muchos adeptos en los últimos años: es una manera de acabar de forma casi definitiva con el vello de nuestro cuerpo en el caso de que nos sintamos incómodas con él. A simple vista presenta muchas ventajas frente a los métodos tradicionales de depilación, pero también exige unos cuidados específicos, especialmente en zonas delicadas como las axilas.
Hoy hablamos de la depilación laser en la zona axilar, cuáles son sus ventajas frente a otras formas de acabar con el vello y los cuidados que debemos aplicar en nuestra piel después de realizarla, sobre todo en lo referente a antitranspirantes.
¿Cómo debemos depilar nuestras axilas?
La piel de la zona de las axilas es extremadamente sensible y delicada, por eso debemos cuidarla con especial mimo con un antitranspirante adecuado. La gama Rexona Maximum Protection ha sido testado dermatológicamente contra la irritación, por lo que ofrece una protección completa y segura.
Al hablar de depilación, el método más extendido es el de la rasuración con cuchilla, básicamente porque es rápido e indoloro. Sin embargo, es bastante agresivo con la dermis y su duración no va más allá de un par de días, por lo que deberemos volver a repetir el proceso exponiendo de nuevo nuestra piel.
Las cremas depilatorias son otra opción, menos agresiva que la cuchilla, que podemos tener en cuenta. Si bien no daña la zona superficial de la piel, sus componentes químicos sí atacan partes más internas.
La cera caliente o tibia es una buena opción, más respetuosa que las anteriores, pero usada por pocas debido a que es bastante dolorosa.
Frente a estas opciones ha surgido en los últimos años la depilación láser, cuyas ventajas son la ausencia de dolor (aunque también se pueden aplicar geles fríos o anestésicos previamente al proceso) y su larga duración ya que ataca directamente el folículo piloso.
¿Cómo debo cuidar la piel de mis axilas con la depilación láser?
Unos cuantos puntos a tener en cuenta serían los siguientes:
Antes de las sesiones: debemos mantener la piel de la zona bien hidratada y limpia con un antitranspirante a nuestro gusto: una buena idea es aplicar el antitranspirante Rexona Maximum Protection la noche anterior a nuestra sesión de depilación.
Durante la sesión: nuestra piel debe estar bien limpia y sin rastro de antitranspirantes o desodorantes.
Después de la sesión: es importante no usar un antitranspirante en las siguientes 24 horas a nuestra sesión de láser. A partir de ahí tenemos que escoger uno cuyo formato preferiblemente no sea de spray y que no contenga alcohol: la gama Maximum Protection de Rexona, sin alcohol ni parabenos, es perfecta para este propósito.
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