El arroz es un ingrediente que no falta prácticamente en ninguna despensa, incluso es la base de la alimentación en muchos países. Es una de las fuentes de carbohidratos más socorrida y da mucho juego en la cocina, pero hacía tiempo que en casa solo lo usaba como guarnición o para enriquecer salteados. Esta receta saludable de arroz al horno con tomate ha sido una deliciosa variación.
Es una adaptación bastante libre de lo que al parecer es un plato típico portugués, y lo que me convenció fue tener que dar salida a los últimos tomates cosechados del verano que ya habían madurado casi demasiado. Podéis hacer este sencillo pero rico arroz con los tomates que tengáis a mano o con una buena conserva.
Precalentar el horno a 190ºC.
Primero hay que pelar los tomates; si son muy maduros la piel saldrá fácilmente, pero también podemos escaldarlos. Para ello, llenar una olla con agua hirviendo, realizar unos cortes en cruz en la parte inferior de los tomates, sumergir en el agua 15 segundos, sacar a un cuenco con hielo, enfriar y retirar la piel.
Podéis retirar las semillas aunque no lo recomiendo, a mí me gustan y quitándolas también te llevas parte de la carne y jugos de los tomates. Trocear en piezas pequeñas y reservar con el jugo que suelten.
Picar la cebolleta y el diente de ajo. Calentar un fondo de aceite de oliva en una cazuela que se pueda llevar al horno y pochar ambos ingredientes con una pizca de sal, a fuego suave, durante unos 8-10 minutos, vigilando que no se quemen.
Incorporar los tomtes, subir un poco el fuego y cocinar unos minutos, machacando con una espátula o cucharón grande, hasta que se empiecen a deshacer. Añadir el azafrán, remover y echar el pimentón, sin dejar de mezclar con suavidad. Salpimentar y dejar que se evaporen los jugos del tomate.
Retirar todo el sofrito y añadir el arroz seco a la cazuela con una cucharada de aceite. Cocinar a fuego medio removiendo, hasta que el arroz se tueste un poco. Devolver la mezcla de tomate, mezclar bien y cubrir con 400 ml de caldo.
Mantener la cocción suave (que haga chup-chup) sin remover durante 15 minutos. Echar el resto del caldo y llevar al horno con cuidado. Hornear unos 15-20 minutos más, hasta que esté bien seco y dorado por encima. Dejar reposar unos minutos fuera del horno y servir con romero y pimienta negra.
Con qué acompañar el arroz al horno con tomate
A pesar de su humildad y sencillez, este arroz al horno con tomate es muy sabroso y se disfruta como plato único por sí solo, más si nos gusta un fondo seco bien tostado estilo socarat. Pero también es estupendo para acompañar pescados o carnes, para tomar con una buena ensalada de temporada al lado.
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