Creo que mi súperalimento favorito es el brócoli. Se le atribuyen muchas propiedades saludables, tiene pocas calorías pero es muy saciante y, además, es muy versátil en la cocina. Pero hay que recordar que no solo se comen las “flores”, y este pollo a las hierbas con tallo de brócoli salteado lo demuestra. ¿Tiráis el tronco?
Espero que no, porque el interior del tallo del brócoli es muy tierno, rico en nutrientes y con un sabor delicioso. Solo hay que quitar la base más dura y pelarlo un poco, descubriréis una carne más suave interior, que incluso de puede comer cruda. En esta receta lo saltearemos sin más complicaciones con una pechuga de pollo de sabor muy mediterráneo.
Secar la pechuga de pollo con papel de cocina, retirar los posibles restos de grasa y cortar en cubos del tamaño de un bocado. Disponerlos en un cuenco, salpimentar y mezclar con el zumo de limón, el vinagre, el aceite de oliva y el vino. Añadir el tomillo, el romero, el perejil lavado (una o dos cucharadas de cada, al gusto) y el diente de ajo muy picado. Remover, tapar y dejar reposar como mínimo 30 minutos.
Lo ideal es usar esta receta como reaprovechamiento del tronco de brócoli que nos haya sobrado de otro plato. Podemos usar una unidad grande o dos más pequeñas, depende del ejemplar.
Lavar el tallo del brócoli y separar las posibles hojas que tenga, reservándolas. Cortar la base del tronco y pelar ligeramente las partes más duras externas, con un pelaverduras o con un buen cuchillo afilado. Cortar en dos mitades longitudinales, y repetir la operación con cada una si fueran muy gruesas. Picar en piezas pequeñas.
Calentar un poco de aceite en una buena sartén antiadherente y añadir el pollo escurrido. Saltear a fuego vivo unos minutos hasta que se dore. Añadir el brócoli y un chorro de vino o de caldo y dejar que se evapore la mayor parte del líquido. Salpimentar ligeramente y saltear hasta que la carne esté cocinada y el brócoli tierno. Añadir más perejil antes de servir.
Con qué acompañar el pollo a las hierbas con tallo de brócoli
Esta receta de pollo y tallo de brócoli se puede tomar perfectamente como plato único o acompañar de una guarnición de arroz, patatas, cuscús, quinoa o mijo. A mí me gusta dar otro toque de limón justo antes de servir, con zumo o su ralladura, aunque también le iría bien un poco de salsa de soja baja en sal.
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