No resulta fácil conseguir pescado fresco y menos aun si estamos en cuarentena, por eso, una buena opción para disponer de este noble alimento es congelar pescados y mariscos en casa para almacenarlos de forma segura.
Cómo congelar pescados y mariscos
Para congelar pescado es importante partir de un pescado fresco y limpio, sin vísceras ni restos de escamas o sangre. Para ello, podemos lavar bajo el grifo y secar.
Asimismo, recomendamos fraccionar pescados y mariscos en raciones comestibles, guardando por ejemplo filetes, postas o cortes listos para descongelar y cocinar.
Una vez limpio y racionado el pescado o marisco, debemos colocar en recipientes aptos para congelador con cierre hermético o bolsas bien cerradas para que no ingrese ni humedad ni aire al mismo.
Colocamos en la parte más fría del congelador (suele ser el primer cajón) y allí podemos almacenar el pescado por tres meses sin inconveniente.
Para descongelar recomendamos pasar al frigorífico por 24 horas y no dejar a temperatura ambiente. También es una opción cocinar el pescado sin descongelar, directamente del congelador.
Para tener pescado durante la cuarentena, el congelador puede ser nuestro gran aliado y ayudarnos así a comer más sano.
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