Elegir el tipo de helado adecuado para la salud

Con el calor llegan los helados y con tanta variedad que nos ofrecen los diferentes fabricantes muchas veces no sabemos cuáles elegir. Por ello en esta ocasión vamos a diferenciar entre un tipo u otro de helado y lo que nos aportará a nivel nutricional.

Es cierto que los helados, como cualquier dulce, está pasando por horas bajas, debido a que se le ha hecho muy mala prensa. Por ello cada vez es más la variedad de sabores y tipos de helados sin azúcares o bajos en grasa. Nosotros queremos ayudarnos a tener las cosas claras al respecto, y por ello vamos a ver algunos de los tipos más habituales y sus características.

Helados de yogurt

En primer lugar vamos a detenernos en los helados que desde hace unos veranos son la estrella, los de yogurt. En teoría son mucho más saludables y digestivos, ya que están elaborados a partir de yogurt natural. Por lo que suelen ser bajos en grasas, esto es cierto, pero lo que no solemos tener en cuenta es que tienen azúcares añadidos, que dotan a este tipo de helado de altas cantidades de calorías provenientes de azúcares refinados.

Helados sin azúcar

Como segunda opción saludables solemos tener los helados sin azúcares. Normalmente se suele sustituir con edulcorantes o azúcares naturales como la fructosa, pero, a pesar de existir en el mercado muchas variedades, no tener azúcares no quiere decir que no contengan grasa. Por ello es importante que leamos las etiquetas y los ingredientes que llevan para saber a ciencia cierta si contiene o no mucha grasa.

Sorbetes

Los sorbetes

son otro tipo de helado que solemos encontrar entre la oferta. Normalmente están elaborados a partir de fruta natural, pero, aun conteniendo poca grasa, a causa de la materia prima, suelen llevar grandes cantidades de azúcares y por lo tanto nos pueden aportar altas dosis calóricas. Por eso es muy bueno saber el tipo de azúcares que llevan o si están edulcorados para hacerlos mucho más ligeros.

Helados tradicionales

En último lugar nos vamos a detener en los helados tradicionales elaborados a partir de nata y sabores como las frutas y demás. Para su elaboración es cierto que se utiliza azúcar y suelen contener grasas, pero suelen ser los más naturales en la elaboración y los que más nutrientes nos aportarán. Por ello, con moderación pueden ser una buena alternativa para endulzarnos, refrescarnos y nutrirnos cuando el calor más aprieta.

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