Con el calor del verano a veces nos apetece menos meternos en la cocina a preparar la comida: buscamos algo rápido que sacie por un lado el calor y por otro lado la gusa que se genera a distintas horas del día, sobre todo a media mañana o a media tarde. Así, es fácil que echemos mano de helados o de polos, que están fresquitos y además sabrosos (gracias a las altas cantidades de azúcares y grasas que contienen).
En el caso de la merienda de los niños es muy socorrido recurrir a los polos "flash": esos pseudo-helados que vienen en un recipiente de plástico y que podemos encontrar prácticamente en cualquier quiosco. Son fáciles de encontrar, son baratos y a los niños les encantan, pero ¿qué les estamos dando realmente cada vez que les ofrecemos un polo flash?
La composición nutricional de un polo flash: básicamente agua con azúcar
Los polos industriales suelen tener una composición parecida a la de los polos flash
Los polos flash, como hemos dicho, se venden en quioscos, en pequeños comercios y también en grandes superficies (en este caso suele tratarse de paquetes con varios flashes listos para congelar en casa). Cada flash suele tener una capacidad de entre 70 y 90 mililitros, dependiendo del fabricante, y contienen, básicamente, agua con azúcar y colorantes.
Echemos un vistazo a la composición de tres tipos de flash diferentes (valores por cada 100 gramos) que hemos encontrado en las tiendas:
| MARCA | KILOCALORÍAS | HIDRATOS DE CARBONO | AZÚCARES | PROTEÍNAS | GRASAS | SAL |
|---|---|---|---|---|---|---|
| Zamba | 24 | 6,2 g | 6,2 g | 0 g | 0 g | 0,5 g |
| Burmar Flax | 22 | 5 g | 5 g | <0,1 g | <0,1 g | <0,1 g |
| Kelia | 28 | 7 g | 7 g | 0 g | 0 g | 0,7 g |
El aporte nutricional de estas golosinas es prácticamente nulo: lo único que aportan a los niños es azúcar, entre 3,5 y 6,3 gramos de azúcar por flash, dependiendo del tamaño y del fabricante.
Si echamos un vistazo al listado de ingredientes, donde os recordamos que estos se listan de mayor a menor presencia en el producto, vemos que, evidentemente el mayor contenido es de azúcar seguido de acidulantes, estabilizantes, edulcorantes (sí, además del azúcar) y colorantes según el sabor de cada flash.
Sí hay un aviso común en los tres productos que hemos analizado: en todos ellos se avisa de que "el colorante E-122 puede tener efectos negativos sobre la actividad y atención de los niños". Esto se debe a que ya desde hace unos años existen estudios que relacionan el uso de algunos colorantes y conservantes con la hiperactividad infantil.
También se avisa que "contiene una fuente de fenilalanina". Es necesario avisar de esto ya que la fenilalanina es un aminoácido esencial que en grandes dosis puede causar una intoxicación con daños graves para la salud. Se encuentra generalmente en chicles, golosinas y refrescos.
Entonces, ¿qué le doy de merendar al niño?
Los polos hechos en casa con puré de frutas pueden ser una opción más saludable
Conviene recordar que no se trata solamente de que estemos ofreciendo básicamente azúcar a los niños (que no deberían consumir en su dieta más de 20 gramos de azúcares añadidos) y que debe añadirse a todo el azúcar que toman a través de otros alimentos infantiles. Debemos pensar también en todas las opciones saludables que un niño está dejando de tomar para merendar si en su lugar le ofrecemos un polo flash de estas características.
Un niño que merienda agua con azúcar está dejando de consumir alimentos con un mejor aporte nutricional, como podría ser una pieza de fruta, unos palitos de zanahoria con mantequilla de cacahuete casera, un yogur natural con fruta cortada o un puñado de frutos secos.
A continuación os dejamos algunas ideas que podéis implementar en las meriendas de los más pequeños de la casa (y en las vuestras):
Vasitos de yogur, fresas y semillas de chía con crujiente de avena: si las semillas de chia no les hacen demasiada gracias, siempre podéis retirarlas. No deja de ser un yogur natural con fruta y cereal.
Siete meriendas saludables y fresquitas para combatir el calor: siete ideas diferentes en las que las frutas son las grandes protagonistas de estas meriendas. Una forma genial y saludable de combatir el calor del verano.
Smoothie bowl de fresas, plátano y queso fresco con avena: más fruta fresca, en este caso mezclada con smoothie de otras frutas, para incluir vitaminas y las raciones de fruta y verdura necesarias en la merienda.
Recetas de tortitas: sanas, fáciles y muy sabrosas: a todos los niños les encantan las tortitas. Además, son súper sencillas de preparar y podemos acompañarlas de frutas frescas para completar una rica merienda.
Trozos de fruta con Nutella casera: tan fácil como preparar nuestra propia Nutella (es muy rápido y sencillo), cortar unos gajos de manzana, piña o de la fruta favorita de los niños y dejarles dipear en el chocolate.
Imágenes | iStock
En Vitónica | 70 días consumiendo solo el azúcar que necesitas y ni un gramo más
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