Para conocer mejor lo que comemos, el único recurso accesible al consumidor es el etiquetado de los alimentos, por ello, su lectura es de gran importancia. Un estudio realizado por Consumolab, centro especializado en el estudio del comportamiento del consumidor, nos revela qué leemos en la etiqueta de un alimento.
El estudio fue realizado con 2500 consumidores de todo el país, de diferentes edades, e indica que sobre todo, los consumidores fijamos nuestra atención en la fecha de caducidad y consumo preferente, seguido por la lista de ingredientes y la información nutricional del producto.
El 90% de los consumidores afirma leer las etiquetas de los alimentos al momento de ir a comprar, aunque algunos realizan esta tarea siempre mientras que otros sólo lo hacen cuando compran el producto por primera vez. Pero el 100% de los consumidores que debe llevar una dieta especial por sufrir determinadas intolerancias, alergias u otras patologías, leen las etiquetas de los alimentos.
Los datos menos leídos por los consumidores son la denominación del fabricante, el origen y el contenido de alérgenos del producto, exceptuando consumidores con intolerancias o alergias alimentarias.
Asimismo, se desprende del estudio que si bien la lista de ingredientes es muy leída por los consumidores, el 38% de ellos no entiende la misma al completo, y algo similar sucede con los beneficios y cualidades del alimento, es decir, las leyendas que destacan aspectos del producto, pues los consumidores no están del todo satisfechos con las mismas.
Las conclusiones de esta encuesta revelan que a pesar de la nueva legislación vigente desde diciembre que pretendía ofrecer información más comprensible al consumidor acerca de los alimentos, hoy en día el etiquetado no resulta del todo útil por la complejidad de la información brindada.
Es decir, si bien los consumidores intentamos conocer mejor lo que comemos leyendo en gran medida el etiquetado, éste aun tiene mucho por mejorar para que, como consumidores, podamos escoger con conocimiento y fundamento los alimentos a comprar. Por otro lado, aunque la mayoría de los consumidores miramos el etiquetado, muchos no prestan atención a la información nutricional de los productos, datos que pueden ser de gran ayuda para comer más sano, e incluso, para adelgazar.
Vía | Directo al Paladar
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En Vitónica | Por qué leer las etiquetas de los alimentos
Imagen | Thinkstock
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