El bocadillo típico en los recreos de colegios e institutos es que lleva mortadela, salami, chorizo o algún tipo de embutido. En la mayoría de casas no falta el fuet o la morcilla blanca para picar algo antes de comer, y ni que hablar tiene el consumo de hamburguesas o perritos con carne de mala calidad. Los resultados de una de las comunicaciones de la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzheimer ha dejado un dato muy preocupante que debemos tener en cuenta.
La asociación entre la carne roja procesada y la salud de nuestro cerebro
Como cada año, la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzheimer ha revelado todo tipo de novedades con respecto a esta enfermedad. A finales de julio de 2024 un grupo con los mejores expertos en Alzheimer del mundo se reunió en Filadelfia para intentar mejoras la prevención y el tratamiento de la enfermedad neurodegenerativa.
Una de la exposiciones situaba en el 14% el aumento del riesgo de demencia por consumir únicamente dos porciones de carne procesada a la semana, unos 30 gramos. Este dato es demoledor, especialmente en países como España en los que es habitual tomar carne procesada antes de comer (salchichón, chorizo, tocino...) o hacernos bocadillos de mortadela, salami o similares.
El dato proviene de carne roja procesada, que no es lo mismo que carne roja a secas o carne blanca procesada (fiambre de pavo por ejemplo). Esto no quiere decir que la carne roja o la carne blanca procesada sea buena para la salud, pero que tampoco deje de serlo.
Lo que quiere decir es que en todo momento de habla de carne roja procesada. Este tipo de carne incluye hamburguesas, perritos, bacón, pero también embutidos que solemos tomar prácticamente a diario en muchos casos. ¿Cuántas porciones de este tipo de alimentos comes cada día?
Cada porción adicional es aún más nociva
Al aumento del riesgo comentado por comer apenas 30 gramos de carne roja procesada se suma un 1,60 - 1,70 años adicional de envejecimiento cognitivo por cada porción adicional. Ese aumento del envejecimiento supone una peor cognición global y un empeoramiento de la capacidad de recordar y comprender palabras y oraciones.
“Se ha demostrado también que la carne roja procesada aumenta el riesgo de cáncer, enfermedades cardíacas y diabetes. Puede afectar al cerebro porque tiene altos niveles de sustancias nocivas como nitritos (conservantes) y sodio”, afirmó Li, una de las investigadores del congreso.
A los problemas, soluciones
El lado positivo que extraemos de la comunicación es que los hallazgos expuestos en el congreso también sugieren que las personas pueden reducir su riesgo de demencia reemplazando una porción de carne roja procesada por una porción de nueces y legumbres, como frijoles y guisantes.
Reemplazar una porción diaria de carne roja procesada por una porción diaria de frutos secos y legumbres se asoció con un riesgo 20% menor de desarrollar demencia y 1,37 años menos de envejecimiento cognitivo. Por lo tanto, intenta reducir al máximo el consumo de carne roja procesa y eleva la ingesta de alimentos saludables para el cerebro como los frutos secos y las legumbres.
Referencias
Processed Red Meat Raises the Risk of Dementia; Swapping It For Nuts and Beans May Lower Risk. Alzheimer’s Association International Conference
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Imágenes | Matthieu Joannon (Unsplash), Frank Zhang (Unsplash), Rhamely (Unsplash)
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