Sabemos que las zapatillas son claves al momento de correr, pues son en definitiva las que nos pueden favorecer grandemente o por el contrario, perjudicarnos si no son adecuadas a nosotros. Por eso, cabe preguntarnos periódicamente cuándo debemos cambiar las zapatillas para correr.
Las zapatillas se gastan con el uso y la no renovación puede hacer que la biomecánica de la carrera se vea afectada, así como las articulaciones y el pie debido al desgaste de la amortiguación y demás materiales de sostén que posee el calzado.
Por eso, hay dos formas de identificar cuándo debemos cambiar las zapatillas para correr, una de esas es contabilizar los kilómetros, pues por regla general las zapatillas no duran más de 1000 kilómetros en igual estado.
Pero si no contabilizamos la distancia que recorremos con nuestras zapatillas, hay otros indicadores de que ya necesitamos un cambio de calzado:
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Suela desgastada: si al observar la suela de la zapatillas observamos un evidente desgaste estamos ante un indicador de necesidad de cambio, pues ya el calzado no nos sujetará como antes ni nos contendrá al tener un apoyo más fino.
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Puedes doblar la zapatilla: salvo excepciones como las zapatillas extremadamente flexibles, si puedes doblar perfectamente el calzado casi uniendo la punta con el talón del mismo, indica que la entresuela está gastada y necesita renovación.
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Poca amortiguación: si te das cuenta que al correr las zapatillas producen un ruido como si golpeara contra la superficie, significa que la amortiguación está disminuida y por lo tanto, no es aconsejable continuar corriendo con ellas.
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Contrafuerte volcado hacia un lado: el contrafuerte es la parte trasera de la zapatilla que da sostén al talón y contiene al pie evitando la sobrepronación, por ejemplo. Si ésta zona está inclinada hacia un lado y no perpendicular al suelo, es porque ya nuestro uso a afectado su forma y necesita cambio.
Periódicamente recuerda preguntarte si tu calzado necesita renovación y ten en cuenta estos indicadores que te ayudarán a saber cuándo cambiar las zapatillas para correr y así, podrás obtener un movimiento más efectivo y seguro.
Imagen | Tejas Prints
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cabito
Gracias Gabriela. La verdad es que normalmente suelo hacer una "estimación" de los kilómetros, que seguro que no es siempre correcta aunque aproximada, pero el resto de los consejos para valorar el desgaste me han parecido muy útiles.
Juancamina
Si, las recomendaciones serían aprox. 700 km. Luego vienen los "peros": 1. Todavía las veo bien. 2. Quiero probar otro modelo/ marca (yo) y no he podido viajar a una ciudad grande donde consigo y en la mía no hay ese modelo. 3. Son caras. 4. No les veo defectos, el desgaste es parejo. 5. Te pasas de los 1000 km y ya las ves que se acercan al final je je y o viajas y pruebas con lo que sueñas o vuelves a comprar las mismas y arre con lo mismo otros 1000 km. Es lo que me está pasando. Ruego que me duren un mes más porque pronto viajaré. No todos podemos tener un par de cada color como veo algunos casos en el gym ja ja...asombroso como combinan! Abrazo Gabriela. Juanca.
javiergarcia
¿Recomendáis alguna marca en especial? Las mías son unas Nike y ya les va tocando renovar... ;-)
i.celemin
Gracias x este post, estaba ya pensando en cambiar de zapatillas de correr y me han quitado las dudas, por cierto alguien sabe de alguna tienda especifica para que ta hagan zapatillas a medida en madrid? un saludo!!!!!
spobler
A parte del desgaste y todo lo que se comenta en el artículo, mi pregunta es tenemos que tener en cuenta el tiempo que tienen las zapatillas, ya que tal vez no hemos llegado a los 1000 km, y no suframos todos los desgastes que se comenta... pero mi pregunta es si hace tres años que empece utilizar unas zapatillas, y las voy usando a menudo... los materiales de esta podrán haber deteriorado poco a poco? hasta el punto que sea necesario un cambio?.
saludos.
plastelino
Buff, yo noté bastante cambio cuando dejé de correr con zapatos, se me gastaban siempre por la zona del tacón. Ahora que corro con pantuflas todo mejor, pero siempre termina apareciendo el dedo gordo a través de la puntera, quizás me tendría que cortar las uñas más a menudo.