No es un tema que preocupe mucho a los corredores el de atarse los cordones. Normalmente todo el mundo se los ata bien y no hay más que hablar. Pero basta con que tengamos una carrera o competición para que ese día los cordones fallen y se desaten. Hay que pararse, perder tiempo y con el esfuerzo, intentar atarlos bien. ¿Cómo hacer que no se desaten los cordones?
Lo primero y evidente: hay que atarse bien los cordones antes de salir a correr. Hay varias formas de atarse los cordones de unas zapatillas deportivas, yo os recomiendo un doble nudo y evitar los cordones excesivamente largos. Como medida preventiva, meter la lazada por dentro de la zapatilla o por la entrelazada de la lengüeta.
Otra forma de evitar que se desaten los cordones es utilizando gomas elásticas en lugar de cordones. En el extremo pondremos unos topes y listo, no se moverán mientras corremos. Esta opción yo la he utilizado cuando he hecho algún triatlón y la verdad, es muy cómoda, además de ajustar bien la zapatilla y dar algo de margen a la pisada, sin ir tan sujeta.
Mucho cuidado con los días de lluvia, al pesar más los cordones, si son muy largos tienden a bailar en exceso y desatarse antes. Recuerdo una carrera que hice lloviendo, llegué a tener que pararme en tres ocasiones para atarme los cordones, con el frío no era capaz de apretarlos bien y la lluvia hacía que a los pocos kilómetros volvieran a desatarse.
Si tus cordones tienden a desatarse con frecuencia, prueba a cambiarlos por otros. Muchas veces la forma o el tipo de material de los cordones hacen que el nudo se deslice con más facilidad. No obstante, nada que no arregle un buen nudo.
Imagen | iStockphoto
Video 1 | TresDosUno TV
Vídeo 2 | Actividad Física y Bienestar
Ver 1 comentarios