Las mesetas en la pérdida de peso son un problema frecuente, sobre todo, si no tenemos muchos kilos de más. Sin embargo, no son un proceso irreversible sino que podemos mover la báscula a nuestro favor con sencillos cambios en nuestro estilo de vida. A continuación te mostramos algunos de ellos que te ayudarán a vencer la meseta y continuar perdiendo peso.
En primer lugar, debemos saber cuál es la causa de nuestra meseta para después revertirla y continuar en proceso de adelgazamiento, si bien muchas veces tiene que ver con nuestro metabolismo y el método que empleamos para adelgazar, también la mayor flexibilidad en la dieta o a la hora de ejercitarnos puede favorecer la meseta.
Ten en cuenta lo siguiente para vencer la meseta:
Registra todo lo que incluyes en tu dieta
Realizar un registro diario o diario de alimentos en el cual se incluya no sólo lo que comes sino también lo que bebes con las cantidades respectivas de cada cosa es fundamental para saber si estamos incrementando el tamaño de las porciones, si estamos picoteando entre comidas e incorporando sin darnos cuenta un extra de alimentos y energía que nos impide lograr un balance negativo para perder peso.
Comienza por escribir todo lo que bebes y comes con sus respectivas cantidades sin olvidar nada y estarás logrando el primer paso: darte cuenta si allí está la causa de tu meseta.

Reduce el tamaño de las porciones
Aunque comas alimentos muy saludables como cereales integrales, frutas, verduras, lácteos desnatados y carnes magras, el tamaño de las porciones también puede ser la causa de tu meseta. Intenta supervisar la cantidad que consumes y reducir levemente el tamaño de las porciones, de manera que a lo largo del día sumes en todas las comidas una notable cantidad de calorías que ahorras. Si en cada comida reduces unas 20-30 calorías, puedes sumar entre 100 y 150 calorías menos a diarios.
Intensifica y diversifica la actividad física
Si bien puedes estar realizando actividad a diario, quizá necesitas un cambio en el tipo de actividad o en la intensidad de la misma, de manera de producir un esfuerzo diferente en tu organismo y así, favorecer la quema de grasas, la salud y el gasto calórico. Puedes agregar tiempo, puedes cambiar de actividad para demandar un movimietno diferente al cuerpo o también, puedes incrementar la intensidad, sumando velocidad a la carrera, ritmo al baile o peso a determinados movimientos.
El cambio en la actividad física puede serte de gran ayuda para fomentar la pérdida de peso y superar una meseta.

Adopta un cambio de actitud
En la mente puede estar otra de las causas de nuestra meseta, pues si estamos padeciendo estrés emocional, sufriendo problemas laborales o familiares o simplemente descansando poco, estaremos menos concentrados en nuestro plan de adelgazamiento y difícilmente podremos lograr una dieta y una actividad eficaz si no tenemos la mente en condiciones.
Entonces, te proponemos para vencer la meseta y continuar perdiendo peso, adoptar un cambio de actitud, controlar la dieta y la actividad desde una perspectiva diferente, para uno mismo, porque te lo mereces y es algo bueno para ti. Adopta un plan de adelgazamiento como un mimo a ti mismo, aleja la cabeza de las prohibiciones alimentarios y del ejercicio tortura y céntrate en los aspectos positivos, en disfrutar de la actividad física, en descansar cuando lo necesitas y en disfrutar de ricos y sanos platos.
Organízate para comprar, cocinar y comer de manera de no dejar al azar el plan de adelgazamiento y eso también será una gran ayuda para no sobrecargar tu mente mientras puedes planificar y lograr un adelgazamiento exitoso.
Un poco más de atención, planificación y orden es todo lo que necesitas para vencer la meseta y continuar perdiendo peso de manera saludable, sin recurrir a estrategias alocadas, peligrosas y milagrosas.
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8 comentarios
cabito
Un post buenísimo, Gabriela, porque la verdad es que se trata de un problema que nos ha pasado a todos (creo) los que nos hemos propuesto perder peso. A mi me ha ocurrido también, pero no le he dado importancia porque estoy en el peso que quiero y en el que me encuentro a gusto. Al leer el post, me he dado cuenta de que algunas cosas que pones son las que me han ocurrido a mi (sobre todo lo del tamaño de las raciones...),y he tenido que cambiar de actividad durante un par de meses por razones de salud, y perdí algún kilillo, asi que tengo que decir que lo que pone el post es manifiestamente cierto. Un saludo.
emedoble
Cuando se habla de desarrollo muscular se llama estancamiento, pero ocurre igual. Por más que te esfuerces, no consigues progresos.
Y también igual es el tratamiento más efectivo para combatirlo: diversidad.
Tanto para seguir desarrollando musculo como para lograr adelgazar estando estancado, hay que cambiar el enfoque de todo lo que estábamos haciendo hasta ese momento y darle así una sacudida a nuestro cuerpo para forzarle a seguir progresando.
chicadieta
Buen post! sobretodo me parece importantísima la parte de la actitud...
Y con respecto a lo de las porciones, aunque es muy cierto resulta que en muchísimos casos reducir la cantidad de comida que se ingiere es de hecho una mala idea. Muchas veces las mesetas se producen debido a que el metabolismo se ha puesto más lento, porque se están consumiendo menos calorías de las necesarias (de lo contrario no habrían adelgazado en primer lugar). Si se siguen disminuyendo las calorías, esto podría empeorar el problema.
Por eso, aunque parezca contradictorio, muchas veces es preferible aumentar un poco el consumo calórico durante una semana. Esto permite restaurar los valores hormonales y el metabolismo para luego continuar adelgazando cuando se retome un déficit calórico suave a moderado.
Inma_
Con respecto a lo de apuntar todo lo que comes al día, yo me oriento por un programa que se llama CRON-o-METER, en el que metes la cantidad de comida y te indica las calorías, hidratos de carbono, proteínas, grasas... en relación con la actividad física que haces, tu peso y tu edad, informándote además de las vitaminas, minerales y grasas totales del día. A mi me gusta bastante, y me sirve como orientación (nunca será exacto claro). Eso sí... está en inglés xD
azaera
Que razón tienes con este post. Sin embargo, creo que al contrario de todo el mundo, yo tuve una pequeña meseta al empezar. llevaba unos cuatro años en un peso sobrepasado, pero se mantenía ahi. Despues de las vacaciones engordé dos kilos (Granada que es muy mala :P), a pesar del ejercicio que hicimos, no quiero pensar si no nos hubieramos movido.
El caso es que al volver a casa me puse con los habitos saludables de forma definitiva, los dos kilos de mas se fueron volando, en una semana estaban fuera. Pero bajar los dos siguientes fueron un autentico infierno. Los tres siguientes fueron mucho mas sencillos. Y ahora estoy en otras meseta, no por nada sino porque con la lluvia, me muevo menos, andar por un parque embarrado y cayéndote la lluvia encima no es divertido. Eso de estar mojada y el frio no, es una sensación que me cuesta mucho soportar, sino hiciera frio sino calorcito me encantaria :)
No se si la estabilización de un peso(aunque sea sobrepasado) puede ofrecer tanta resistencia al comienzo de una dieta, porque eso no lo había oido nunca, y al principio fue cuando mas ilusionada estaba y mas ejercicio hacía, saliendo de paseo mas a menudo y demás. O estamos antes una casualidad.
De todas formas tus consejos me vienen de perlas. Oye! La mudanza cuenta como ejercicio? xD
montseelyna
Excelente post. Ojala lo hubiera visto hace unos años cuando tenia problemas similares para bajar de peso. Tan sólo cambié mi actividad física y sin cambiar nada más bajé grasas localizadas. Flipé en su día pero ahora lo veo lógico. Cuando el cuerpo se acostumbra a algo...Por eso ahora hago diferentes deportes durante el año y aunque no sea toda una profesional en ningún de ellos me ayuda a mantenerme y no caer en la rutina. Animo a cualquiera que antes de cambiar su hábitos alimentacios "sanos" o racionar porciones primero diversifique su actividad deportiva. Si ya no funciona con esto pues a mirar lo demás ^.^