Por todos es sabido que las patatas fritas y demás snacks que solemos utilizar para picar entre horas no son nada recomendables para nuestra dieta ni para nuestra salud. Un consumo continuado de estos alimentos puede tener consecuencias a largo plazo.
A pesar de todo la mayoría de nosotros suele ingerir de vez en cuando este tipo de alimentos que tan ricos nos resultan al paladar. Por este motivo os vamos a dar algunas recomendaciones para saber cuáles elegir para, aún dentro de unos límites, obtener mayores beneficios para el organismo, pues lo que vamos a hacer es ingerir un alimento alto en calorías, pero que no sean vacías, sino que nos aporten algo más.
La mayoría de estos snacks están realizados con harinas refinadas y con aceites de dudosa procedencia, por este motivo es importante que sepamos elegir lo que mejor nos va a sentar nutricionalmente hablando. Para ello debemos prestar especial atención a los ingredientes y la elaboración de los aperitivos que consumimos entre horas. No nos sirve cualquier cosa, y para ello tenemos que estar atentos.
Las etiquetas de los envases es la única información que vamos a tener al respecto, por ello tenemos que reparar en ella y saber las cualidades de un alimento antes de ingerirlo. Sobre todo tenemos que prestar atención en los ingredientes, siendo más recomendables los snacks realizados con maíz, que no contengan colorantes y a ser posible tostados en vez de fritos, ya que de esta manera restaremos el aporte de grasas saturadas.
Si nos decantamos por snacks fritos es mejor elegir aquellos que se han preparado en aceite de oliva. Aunque suelen ser más caros, el aporte de ácidos grasos es más saludable, pues nos brindan grasas mono y poliinsaturadas, que nuestro cuerpo asimila mejor y utiliza para obtener energía. Es importante tener esto en cuenta, pues la mayoría de las grasas que nos aportan estos aperitivos suelen ser ‘trans’ y de mala calidad. Si recurrimos a las preparaciones artesanales o a los snacks elaborados en nuestra propia casa, sabremos con más seguridad los ingredientes utilizados y la calidad de los mismos.
Los aperitivos de toda la vida suelen ser los más recomendables, las patatas fritas de churrería, artesanales y elaboradas con aceite de oliva son las mejores, al igual que los frutos secos, que nos aportan grandes beneficios para nuestro organismo, o las palomitas preparadas en nuestra casa con aceite de oliva. Desde luego que cuanto más sencilla sea nuestra elección mucho mejor para la salud, pues los aperitivos más elaborados contienen mayores colorantes, conservantes y sustancias como aromas, grasas de dudosa procedencia...
Desde luego que no tenemos que acostumbrarnos a ingerir este tipo de alimentos, pero de vez en cuando, cuando nos apetezcan y los comamos tenemos que ser conscientes de elegir lo mejor. No siempre lo que más nos gusta es lo más recomendado para nuestro organismo. Leer bien las etiquetas es la clave para saber lo que estamos comiendo.
Imagen | SXC
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