Mucho se ha hablado acerca del té verde como un recurso para favorecer la pérdida de peso y quizá por ello, una nueva dieta milagro ha surgido a base de este alimento. Se trata de la dieta del té verde que a continuación sometemos a examen.
¿En qué consiste la dieta del té verde?
La dieta del té verde tiene una duración de 7 días, durante los cuales prometen una pérdida de peso de hasta 5 kilos, bebiendo a diario, unas tres tazas de té verde que, según fundamentan, favorece la quema de grasa e inhibe el apetito.
Las tres tazas de té verde se distribuyen en desayuno, merienda y cena o almuerzo, y se establece un menú cerrado (estricto, que se debe seguir) basado en proteínas magras, frutas y vegetales.
Los cereales se reducen al máximo en los menús de la dieta del té verde, lo cual también conlleva una gran reducción calórica y cada día se ingieren alrededor de 1500 Kcal.
No se realizan sugerencias acerca de la actividad física ni existen adaptaciones de la dieta según nivel de actividad, situación biológica u otras condiciones particulares.
Errores de la dieta del té verde
Cuando hablamos de lo que dice la ciencia acerca del té verde y la pérdida de peso, vimos que si bien puede ayudar a a lograr un peso estable, el té verde no es un producto milagro, y en esta dieta, el primer error es ponderar a esta infusión en demasía y basar la estrategia para adelgazar en la misma.
Otro error de esta dieta es el muy bajo aporte calórico que ofrece cada día y la generalización sin personalizar la alimentación de acuerdo a cada persona.
Por otro lado, al ser una dieta de muy pocas calorías, puede inducir la pérdida rápida de peso y afectar nuestro metabolismo, pudiendo provocar después, el tan temido efecto rebote.
Como si fuera poco, la reducción al mínimo de la ingesta de cereales y derivados, puede provocar ansiedad y como cualquier prohibición, puede generar más deseos de comer aquello que según la dieta del té verde, no se puede.
Por lo tanto, esta es otra dieta milagro que no nos enseña a comer mejor ni favorece la modificación de hábitos, sino que sólo ayuda a perder peso en forma aguda, sin que podamos disfrutar de los beneficios del adelgazamiento y de una buena salud a largo plazo.
Imagen | Thinkstock y Thinkstock
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