Las probabilidades de sufrir un accidente cerebrovascular están estrechamente relacionadas con nuestra presión arterial, pero al parecer, para conocer el riesgo de ictus con mayor exactitud, lo mejor es medir la presión arterial por la mañana.
Esas son las conclusiones de un estudio realizado con más de 4300 japoneses en donde la presión arterial por encima de 155 mmHg por la mañana se asoció a siete veces más probabilidades sufrir un ictus, mientras que la misma medición por la noche no se vinculó a una incidencia superior de accidentes cerebrovasculares.
Esto puede deberse a que por la noche, son muchos los factores que elevan los valores de presión arterial, tal como la actividad, la comida y demás, mientras que por la mañana, los niveles elevados están más relacionados a cambios fisiológicos que podrían incrementar el riesgo de ictus.
Entonces, al parecer lo mejor es medir la presión arterial por la mañana, sobre todo, si queremos conocer el riesgo de ictus. Aunque por supuesto, siempre es importante controlar este factor y conocer nuestro niveles de presión sanguínea, por ello, si no lo hemos hecho por la mañana, igualmente servirá medirla en otro momento del día.
La presión arterial elevada es un factor silencioso pero muy influyente sobre nuestra salud así como sobre el riesgo de sufrir un ictus, y además, puede evaluarse fácilmente, por lo tanto, siempre es recomendable su medición y control.
Vía | American Heart Association Scientific Sessions Meeting
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Imagen | Lemuelinchrist
