A todos nos encanta jugar con las olas en épocas de calor, realmente es una actividad que divierte a todas las edades. Pero, la diversión finaliza cuando de repente hay algo que nos pone en peligro, pongamos por caso las corrientes de resaca.
Las corrientes de resaca es una de las principales causas de ahogamiento en el mar durante las épocas de más calor. Por ello, te contamos todo sobre ella para que sepas qué es, como identificarla y cómo reaccionar a ella.
Qué es una corriente de resaca
La corriente de resaca o corriente de retorno es una corriente superficial y peculiar del agua que la arrastra desde la costa hacia el mar de forma perpendicular a la orilla, originada por una rotura irregular de las olas, que llegan a la playa con un índice elevado de energía.
Todo el agua que se acumula en la costa busca volver al mar por el canal que se forma en el mar debido a la corriente de resaca. Además, la intensidad está estrechamente relacionada con las olas, a más energía, más intensidad tiene la corriente de resaca.
Cómo detectar una corriente de resaca
El principal problema de las corrientes de resaca es que en ocasiones es muy difícil de identificar, sobre todo cuando la intensidad es baja. Por ello, es importante que sepas que la mejor manera de identificarla es mediante la observación.
Normalmente se aprecian mucho mejor si te encuentras en la orilla o en un punto alto pero, en el caso de que estés en el agua, verás un especie de canal perpendicular a la costa, que lleva parte del agua del mar desde la orilla hasta el océano.
Este canal se caracteriza por contener algunas ramas o basura. Además, a causa del movimiento constante del agua, podrás observar burbujas y, espuma y bancos de arena acercándose a la costa.
Qué hacer cuando nos encontramos con una corriente de resaca
El primer consejo y más importante es mantener la calma y no tomar decisiones precipitadas. Ya que, su peligrosidad no es el ser arrastrado por las olas mar a dentro, sino la manera que reaccionan las personas frente a ella.
Muchos bañistas, al ver la corriente de resaca, tienden a entrar en pánico y tratan de nadar contra la corriente, provocando que se cansen enseguida y se ahoguen. Por ello, lo ideal es nadar de forma paralela a la orilla unos metros para salir de la corriente y, desde ahí, ponerte a salvo.
Es importante recalcar que, independientemente de tu nivel de natación, no trates de nadar contra la corriente, porqué ni los rescatistas y nadadores expertos pueden escapar de una corriente de resaca.
En el caso de que te resulte imposible escapar, te aconsejamos que te mantengas a flote pataleando, para no agotar todas tus energías. También, trata de pedir ayuda haciendo señales para buscar una forma de llamar la atención de las personas que se encuentren en la orilla.
Por último, queremos subrayar que las corrientes de resaca no causan ahogamientos si se siguen las indicaciones adecuadas. Además, trata de estar atento al color de la bandera, ya que es un indicativo muy importante de la peligrosidad del agua.
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