La torrija, receta dulce humilde de aprovechamiento como pocas, se ha convertido en un dulce elevado a los altares de la gastronomía complicando hasta el exceso su elaboración. Pero en época de Semana Santa es difícil resistirse a ellas, aunque sea para rememorar esos recuerdos de la infancia con un dulce tan tradicional. Siempre podemos hacer torrijas más sanas, y con nuestro propio pan más saludable controlaremos aún más todo el proceso.
En realidad, hay multitud de variaciones sobre la torrija, según costumbres, tradición y gustos de cada casa. Antiguamente se aprovechaba el pan más duro, pero hoy se encuentran panes especiales para hacerlas en los supermercados. No son la opción más recomendable, pues suelen usar harinas refinadas de mala calidad, añadiendo grasas y azúcares.
Un pan tipo brioche tierno y enriquecido con grasa hará que la torrija sea, de base, más calórica, y además absorberá más grasas y azúcares al cocinarla. Proponemos un pan "falso", rápido con levadura de repostería, apto para novatos y sin reposos. Con bajo contenido en gluten, rico en fibras y proteínas, nos permite contar con una base más nutritiva y saciante con la que luego ya podemos elegir qué receta de torrija aplicarle.
Precalentar el horno a 180ºC. Disponer en un recipiente el huevo y mezclar con unas varillas manuales con el quark. Se puede usar también una mezcla de queso fresco batido desnatado y yogur natural; en cualquier caso, escurrir el suero.
Añadir las harinas, la levadura y la sal, y mezclar bien con una espátula; continuar amasando a mano hasta tener una masa maleable, algo húmeda, ligeramente pegajosa pero trabajable sobre la superficie de trabajo.
Formar una barra cilíndrica y disponer en una bandeja de horno con papel sulfurizado. Si se le quiere dar un toque más dorado y algo más crujiente a la corteza, mezclar un chorro de leche con cúrcuma y pincelar todo el exterior.
Hornear durante unos 40-45 minutos, o hasta que esté dorado. Dejar enfriar por completo sobre una rejilla antes de cortar en rebanadas. Si preferimos la corteza más blandita, pintarla con más leche o con aceite aún en caliente.
Con qué acompañar el pan para torrijas
Obviamente, este falso pan está pensado para preparar unas torrijas más saludables y nutritivas sin tener que recurrir al comercial de supermercado, así que lo suyo es emplearlo en la receta que prefiramos preparar. Podemos usarlo en nuestra receta de torrijas veganas sin azúcar, o con alguna otra de las propuestas incluidas aquí. O, sencillamente, seguir la elaboración casera de nuestra familia que más nos guste, como siempre, con moderación.
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