El pan suele ser un producto controvertido cuando se trata de diferentes dietas; si bien hay muchos tipos diferentes y puede ser perfectamente saludable e incluso compatible con dietas de adelgazamiento, quienes esté restringiendo los carbohidratos o no puedan tomar gluten lo tienen más complicado. Esta receta de panecillos fitness es perfecta para estos casos, o si sencillamente nos interesa un bocado rico en proteínas y más nutritivo.
Para que sea apto también para celíacos hay que comprobar que el salvado de avena sea 100 % libre de gluten, o quizá podríamos probar a sustituirlo por harina de trigo sarraceno o almendra molida. La masa de los panecillos es muy húmeda, pero el lino y el pequeño reposo la vuelve algo gelatinosa, fácil de distribuir con una cuchara. así quedan planitos y muy tiernos, pero si prefieres que tengan más consistencia puedes duplicar la cantidad de harina de garbanzos.
Escurrir bien el suero del yogur y batir con unas varillas en un recipiente con los huevos. Aparte mezclar todos los ingredientes secos menos el sésamo, y combinar ambas masas hasta tener una mezcla homogénea y húmeda.
Tapar y dejar reposar a temperatura ambiente 30 minutos. Mientras, precalentar el horno a 200º C sin aire y preparar una o dos bandejas de horno con papel antiadherente.
Repartir la masa en unas 8-9 porciones, formando montoncitos redondos con una cuchara. Con la misma cuchara u otra más pequeña, o con las manos, humedecidas, dar forma redondeada (será muy húmeda pero gelatinosa).
Cubrir con semillas de sésamo y/o más salvado y hornear unos 30-35 minutos, hasta que estén bien dorados. Esperar un poco fuera del horno antes de dejar enfriar sobre una rejilla.
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Con qué acompañar los panecillos proteicos fitness
Tiernos al natural, estos panecillos son perfectos para tomar tal cual, para cortar por la mitad con un cuchillo de sierra fino y rellenar, y también para tostar o dorar a la plancha. En casa nos gustan con un queso tierno no muy graso y lonchas finas de pechuga de pavo o pollo cocido de buena calidad, para sumar más proteínas al desayuno o después de una jornada de ejercicio, y también son estupendos para un almuerzo o cena con relleno de ensalada, una hamburguesa casera, tofu a la plancha o verduras salteadas.
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