Durante las últimas semanas, una aplicación concreta en nuestros Smartphones ha acaparado más atención que ninguna otra. Se trata de la aplicación Yuka. Se trata de una app que nos permite escanear nuestros alimentos y cosméticos y nos informa de los ingredientes que contienen.
No solo eso, sino que esta aplicación nos da una valoración sobre la calidad de este producto en base a dichos ingredientes. De esta manera, esta aplicación busca ayudarnos a hacer mejores elecciones a la hora de hacer nuestra compra y aprender qué es lo que estamos consumiendo.
Se trata de una aplicación útil para aquellas personas que todavía tienen dificultades a la hora de leer las etiquetas o tener claro qué es exactamente lo que estamos comiendo. Hacer uso de estas aplicaciones puede ayudarnos a evitar los mensajes de la publicidad que nos llevan a considerar saludables productos que no lo son. Se trata de una buena manera de iniciarnos en el reconocimiento de los ingredientes y alimentos que consumimos.
En cualquier caso, siendo una de las primeras aplicaciones que nos ofrece una opción similar, también tiene algunas cosas a las que debemos prestar atención si vamos a utilizarla, de manera que podamos obtener una visión crítica y bien informada de lo que Yuka nos ofrece.
Cómo funciona Yuka
Lo único que tenemos que hacer nosotros como usuarios, es escanear con la cámara del móvil el código de barras del producto en el que estemos interesados, y la aplicación nos devolverá la información y clasificación del producto en cuestión.
En este caso, la app nos indica si el producto es excelente, bueno, malo o mediocre en base a sus ingredientes y la calificación que la propia aplicación utiliza para valorarlos. Para ello, Yuka valora tres aspectos diferentes de los alimentos.
Así, en el caso de la alimentación, la calidad nutricional representa el 60% de la nota que se da al alimento. Esta calidad se mide utilizando como calificación el Nutriscore o conocido semáforo nutricional. El 30% de la nota se ofrece en base a la presencia de aditivos para lo que, según indican en la página web de la app, en informaciones de la EFSA, de ANSES y de CIRC.
En base a esto, la app califica en un nivel de riesgo (sin riesgo, limitado, moderado y elevado). Además, el último 10% lo obtienen los alimentos en base a si son ecológicos o no y se da teniendo en cuenta si tienen la etiqueta ecológica europea.
Dos cosas a tener en cuenta cuando utilicemos Yuka
La evaluación de la presencia de aditivos en los alimentos
En cuanto a la clasificación que hace Yuka de los aditivos, que consiste en el 30% de la puntuación, puede llevar a ciertas confusiones. Debemos tener en cuenta que los aditivos que llevan los alimentos que consumimos son sustancias que se añaden para mejorar o mantener las propiedades de los alimentos.
Los includos en los alimentos que consumimos en España están autorizados por la Unión Europea y se identifican con la letra E. Todos estos aditivos utilizados en nuestra alimentación pasan controles de seguridad y tienen que ser aprobados por la EFSA, de manera que no exista ni un solo aditivo - o concentración del mismo - que no sea segura para nuestra salud.
Es por ello que la EFSA regula qué aditivos, en qué cantidades y en qué circunstancias se pueden utilizar estos aditivos. Concretamente, las dosis son muy importantes, ya que algunas sustancias pueden ser perfectamente inocuas en algunas concentraciones y peligrosas en superiores. En España los controles de seguridad conllevan que no consumamos ningún aditivo en concentraciones peligrosas.
Esto es algo que debemos tener en cuenta a la hora de valorar la información sobre aditivos que nos aporta Yuka. Y es que, la clasificación que realizan puede llevarnos a pensar que el consumo de un alimento puede no ser seguro para nosotros o puede suponer un peligro por el aditivo en sí.
La realidad es que todos los alimentos que comemos en nuestro país son seguros y los aditivios utilizados y sus concentraciones también. Otra cosa diferente, es que estos aditivos estén incluidos en alimentos que sean saludables o no. Por ejemplo, las legumbres de bote incluyen unos aditivos para conservarlos y son un alimentos perfectamente seguro y saludable.
En cualquier caso, es verdad que la presencia de aditivos suele darse en mayor medida en alimentos ultraprocesados, poco saludables. Esto no quiere decir que sean inseguros porque contienen aditivos, sino que son poco saludables precisamente por sus niveles de ultraprocesado y baja calidad nutricional.
Eco no siempre significa saludable
Un 10% de la nota se le da a aquellos productos que son considerados eco. Esto quiere decir, que aquellos que no lo son, pierden esa parte de la nota. Uno de los problemas con esto es que "ecológico" no siempre significa más saludable.
Lo que el sello "eco" indica es que se tratan de productos producidos sin fertilizantes, pesticidas, antibióticos y hormonas. Sin embargo, no significa que el alimento en cuestión sea más sano. Sin embargo, las evidencias científicas no encuentran que estos alimentos sean más saludables ni mejores nutricionalmente que el mismo producto no eco.
En definitiva, debemos tener en cuenta esto, porque darle un 10% de la nota a productos solo por ser eco, puede estar provocando que se dé más nota a un producto menos saludable, únicamente por llevar este sello.
Imágenes | Yuka, Xataka
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