Hoy en día encontramos en el mercado variedad de verduras y frutas en diferentes presentaciones, siendo las más frecuentes frescas y congeladas, sin embargo, las primeras pueden comprarse una vez por semana y refrigerarse en casa antes de usar. Aunque son tres formas válidas de comer frutas y verduras hoy te mostramos los nutrientes que poseen en su formato fresco, refrigerado o congelado.
Diferencias nutricionales entre fresco, refrigerado y congelado
No es la primera vez que se evalúan las diferencias de nutrientes entre vegetales y frutas frescas y congeladas, sin embargo, un reciente estudio publicado en Journal of Food Composition and Analysis incluyó en el análisis nutricional otra categoría: vegetales almacenados en refrigerador que es la forma más común en que los consumidores solemos conservar estos alimentos hasta su consumo, aunque también, es una forma frecuente de almacenamiento en grandes cadenas de supermercados.
Los resultados revelan que las diferencias no son significativas entre las tres formas, sin embargo, los congelados tienen más nutrientes que los frescos refrigerados y similares concentraciones nutricionales o en algunos casos más que los alimentos frescos, pues éstos últimos pierden nutrientes durante su traslado, algo que no ocurre cuando ya se encuentran congelados.
Así, un almacenamiento en el refrigerador por cinco días (que no es demasiado), puede conducir a la pérdida de diferentes nutrientes en los vegetales y frutas frescas y en este caso, siempre es mejor optar por los congelados que conservan mejor sus propiedades.
Las frutas y vegetales congelados no sólo nos permiten vencer la estacionalidad, sino también, comprar una vez en grandes cantidades y tener en el congelador por mucho tiempo sin perder nutrientes buenos para el organismo.
Si haces como yo que compras frutas y verduras frescas una vez para toda la semana, debes saber que quizá sea momento de cambiar, pues al parecer, es mejor comprar con mayor frecuencia estos alimentos frescos para no refrigerarlos por muchos días o bien, optar por congelados si sabes que no lo consumirás en breve.
Incluso, también podemos blanquear los vegetales o darles una rápida cocción al vapor y congelarlos en casa si sabemos que en el plazo de al menos tres días no los usaremos para cocinar.
Bibliografía consultada | Journal of Food Composition and Analysis, Volume 59, June 2017, Pages 8–17.
Imagen | Pixabay
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