En los últimos dos años estamos viviendo un desajuste continuo de los precios. Subidas y bajadas en luz y gasolina, subidas en productos básicos, eliminación de IVA para reducir el precio, pero sigue subiendo. El precio del aceite de oliva no se salva de estos incrementos de precio, siendo actualmente un producto gourmet más que de primera necesidad por su coste. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) propone grasa alternativas al aceite de oliva para cocinar.
Grasas alternativas al aceite de oliva para nuestros platos
El aceite de oliva virgen extra (AOVE) es el pilar fundamental de la Dieta Mediterránea. A la cuenca de este mar se encuentran extensas tierras de olivos que llegan hasta donde se nos pierde la vista. Sin embargo, ante el desconcierto de los mercados, y la falta de cosecha de las últimas temporadas, el precio del aceite de oliva se ha disparado.
Existen grasas alternativas, que si bien tienen características diferentes al estándar de oro que es el AOVE, pueden servirnos para acompañar nuestras ensaladas o para cocinar. Como primera opción no cabe duda de que el AOVE debe ser nuestra elección, pero si el precio excesivo no nos permite hacer mucho uso del mismo, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) propone algunas alternativas.
Grasas en crudo para acompañar nuestras ensaladas
La OCU nos muestra tres tipos de aceites para acompañar platos en crudo, como puede ser una ensalada o un gazpacho, entre otras muchas preparaciones. En la ensalada podemos hacer uso de un aceite de fruto seco como la nuez. Su sabor característico, al igual que el del aceite de oliva, potenciará el sabor de nuestra ensalada.
En el caso de aliños para salsas no necesitamos potenciar tanto el sabor, sino más bien todo lo contrario. La OCU destaca para salsas como la mayonesa utilizar aceites con sabores suaves, como el aceite de soja o de girasol. Los aceites de semillas (lino, sésamo...) también son muy interesantes para utilizar en la cocina cuando vayamos a tomar alimentos en crudo.
Grasas para freír o utilizar en la sartén
A la hora de freír y calentar el aceite, es importante conocer su estructura. Los aceites con alto contenido en grasas poliinsaturadas, como el de maíz, soja o girasol, tienen una estructura más frágil que el aceite de oliva, colza o girasol alto oleico. Estos últimos aceites soportan mejor las altas temperaturas.
Una alternativa al aceite de oliva para freír o utilizar en caliente es el aceite de girasol alto oleico. Es importante distinguir entre aceite de girasol, y el aceite de girasol alto oleico, ya que tienen estructuras diferentes. El aceite de orujo de oliva también es otra opción para preparar nuestros platos calientes.
Grasas para hornear y asar
En el caso que nuestra preparación sea hornada o asadas, podemos hacer uso de la mantequilla, que no es tan interesante para freír. Puedes dorar las verduras o patatas que vas a meter al horno con mantequilla, al igual que ocurre con la nata en otras preparaciones como las cremas de verduras.
Otra alternativa sin aceite
Las freidoras de aire han aumentado su comercialización de forma exponencial en los últimos años. En muchas cocinas ya está presente este electrodoméstico que nos permite cocinar sin utilizar aceite, o usando apenas unas gotas. Esta forma de cocinar puede ser muy interesante para reducir el uso de aceite de oliva, que realmente es el que más nos interesa, por calidad y porque es la joya de la Dieta Mediterránea.
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