El éxito de la dieta keto o cetogénica radica en la gran quema de grasas que se produce para utilizar este nutriente como combustible energético ante la ausencia de hidratos. Sin embargo, muchos alimentos sin hidratos no son recomendables para incluir en la dieta habitual como es el caso del alcohol que debe evitarse aunque no interrumpa la cetosis.
Alcohol: un componente peligroso en la dieta keto
En el marco de cualquier tipo de alimentación el alcohol es un componente que recomendamos evitar si deseamos cuidar la salud, ya que aun en pequeñas proporciones puede resultar perjudicial.
Sin embargo, cuando llevamos una dieta keto para perder peso, aunque escojamos bebidas alcohólicas con nulo o escaso contenido en hidratos, el alcohol puede poner en riesgo de cetoacidosis nuestro organismo.
En primer lugar, el consumo de alcohol puede impedir la producción de glucosa a partir de grasas en el cuerpo y así, ocasionar una hipoglucemia en personas sanas que llevan la dieta keto. Pero además, puede ser la causa de una acumulación de cuerpos cetónicos en el organismo y del desarrollo de cetoacidosis.
El alcohol aporta calorías y puede emplearse como fuente de energía, siendo por ello un obstáculo cuando buscamos adelgazar. Pero cuando se lleva una dieta keto su ingesta puede propiciar la deshidratación y el desequilibrio de agua y electrolitos, poniendo de esta forma en riesgo la salud.
Por ello, aunque optemos por bebidas con bajo aporte de hidratos y no interrumpa la cetosis, el alcohol debe evitarse en la dieta keto como en todo tipo de dietas, si queremos proteger la salud del organismo.
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