Llámalo "operación bikini", "operación bañador", "prepararte para el verano" o como quiera que lo llames: todos conocemos esa sensación de querer llegar "a tope" a la playa o a la piscina y de ponernos a dieta o a entrenar como locos unos meses antes de irnos de vacaciones.
Esta estrategia no suele dar buenos resultados, y es que tanto la salud como la estética son fruto de un entrenamiento, una buena alimentación y un descanso pautados durante todo el año. Por eso este curso te proponemos que comiences con tu "operación bikini" de 2018 desde ahora mismo: sin prisas, sin falsas promesas y siendo constante durante todo el año.
No digas "operación bikini": di "cambio de hábitos"
Lo peor de la llamada "operación bikini" es que, según la concebimos, tiene siempre una fecha de caducidad: sí, me pongo a dieta o comienzo a entrenar para estar bien en verano. ¿Y qué pasa luego?
La "operación bikini" suele estar ligada a dietas extremas basadas en una ingesta mínima de calorías durante un período estipulado de tiempo (y ya hemos hablado en anteriores ocasiones de los peligros para nuestra salud que pueden entrañar este tipo de dietas) y de entrenamiento exhaustivo que solamente podemos mantener durante unas pocas semanas. Pero, ¿qué es lo que pasa después?
No es una "operación express": es un cambio a un estilo de vida más saludable
Lo que suele suceder es que los cambios que realizamos en nuestra vida de cara a esta "operación bikini" no son capaces de crear adhesión en nosotros, uno de los conceptos más importantes cuando hablamos de entrenamiento o dieta. En otras palabras: no somos capaces de mantener esos cambios en el tiempo, generalmente porque son cambios extremos.
En lugar de una "operación" que dure unas pocas semanas o unos pocos meses nos saldrá mucho más rentable ir adquiriendo hábitos saludables (e ir eliminando aquellos que no lo sean tanto) a lo largo de todo el año. Nosotros lo estamos haciendo durante todo este año con nuestro calendario de propósitos saludables en el que os presentamos un pequeño propósito al mes: uno solo puede no parecer mucho, pero si somos capaces de incorporar doce nuevos hábitos saludables a lo largo del año, habremos ganado en salud y seguramente también en estética.
Un cambio de hábitos a largo plazo comenzando desde ahora mismo no te garantiza un cuerpo escultural para el verano que viene (en realidad no hay nada en absoluto que pueda garantizarte eso), pero sí que te pondrá las cosas más fáciles y beneficiará a tu salud en el futuro.
No esperes al mes de mayo de 2018 para ponerte las pilas y comienza a cuidarte ahora.
Imágenes | iStock
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