Sabemos que las enfermedades que hasta hace poco se creían solamente de los adultos, ahora se están manifestando entre los menores y ésto, sin duda, es producto de nuestro estilo de vida actual.
Ya la obesidad, la diabetes y ahora también la hipertensión, acechan a los niños y sobre todo, a los adolescentes, un grupo de población a los cuales no muchos prestamos atención por pertenecer a la edad en la que la vitalidad los caracteriza.
Un estudio internacional y dos estudios realizados en un hospital de niños de Argentina, han demostrado que 1 de cada 20 adolescentes padece hipertensión.
La hipertensión es una de las principales enfermedades cardiovasculares y una de las mayores causantes de accidentes cerebrovasculares, por eso, su diagnóstico, prevención y control, resultan de gran relevancia en toda la población.
Sin embargo, la hipertensión es una enfermedad silenciosa, y que poco se diagnostica entre los adolescentes debido a que siempre se cree que entre los menores las cifras de presión arterial son normales y resulta difícil encontrar la presencia de la enfermedad en este grupo etáreo.
Así, se estima que la mitad de la población adolescente que padece hipertensión no lo sabe, y por lo tanto, no se controla y ésto ocasiona un gran riesgo de sufrir sus consecuencias indeseadas.
En Estados Unidos un 4,5% de los adolescentes padece hipertensión y si bien en muchos países no existen estudios que revelen cifras de la enfermedad en éste sector de la población, es muy probable que los resultados sean similares.
En Argentina se observó en estudiantes sanos que un 20% tenía alta presión arterial o padecía de prehipertensión, el estadio previo a la enfermedad que merece su atención.
La hipertensión existe y existió siempre entre los más jóvenes, pero se diagnostica poco por las razones antedichas.
Pero en la actualidad, las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en países desarrollados y en la mayoría de los países en desarrollo, por eso, se hace imprescindible comprender la importancia de detectar precozmente éste tipo de enfermedades que pueden desencadenar complicaciones severas.
El sedentarismo, el tabaquismo, la alimentación a base de comida rápida con alto contenido en azúcar, sodio, grasas y calorías, obliga a prestar mayor atención a las enfermedades que hasta el momento sólo creíamos patrimonio de los adultos.
Si pensamos un segundo en lo fácil que resulta prevenir la hipertensión, con una alimentación a base de lácteos descremados, frutas, verduras, carnes magras, legumbres y cereales integrales, y con la práctica de actividad física regular que no sólo mejore la circulación de la sangre, sino que también permita aliviar el estrés, creo que todos inclinaríamos la balanza a favor de un estilo de vida más sano que nos ayude a combatir las enfermedades del siglo XXI.
Vía | Asteriscos.Tv En Vitónica | Contra la hipertensión En Vitónica | Importancia del ejercicio físico en hipertensos En Vitónica | Actividad física y una vida saludable para prevenir enfermedades cardiovasculares