Como ya sabemos la osteoporosis consiste en un deterioro de nuestros huesos mediante el debilitamiento de las membranas que los forman. Esta enfermedad afecta a nuestro sistema óseo mermando su resistencia y calidad, así como afectando en la forma de vida de las personas que la padecen.
A pesar de ser una enfermedad degenerativa delicada que lleva un tratamiento específico, la osteoporosis se puede prevenir, y en el caso de sufrirla, mejorar mediante el ejercicio. Mucha gente piensa que hacer deporte si se padece esta enfermedad es malo, algo que dista mucho de la realidad, y es que practicar deporte ayuda a nuestros huesos de muchas maneras.
La práctica de deporte por parte de personas que padecen osteoporosis ayuda a que mantengan los huesos y los músculos activos. Esto se debe a que nuestra circulación mejorará, a consecuencia del ejercicio, y con ella el riego de todas las partes de nuestro cuerpo, facilitando de esta manera el envío de nutrientes. Esta es una de las principales causas por las que el hueso se ve reforzado si practicamos ejercicio.
A pesar de no ser concluyentes los estudios que hay al respecto, se ha detectado que las personas que practican deporte y tienen osteoporosis mantienen durante más tiempo sus huesos fuertes y frenan el debilitamiento de éstos. Es un hecho que se debe a que el ejercicio estimula el fortalecimiento no sólo de nuestros músculos, sino de nuestros huesos al mismo tiempo.
Lo mismo sucede con las personas que no sufren todavía osteoporosis. El deporte es una buena forma de prevención, ya que mantiene los huesos fuertes y jóvenes por más tiempo, nutridos de todas las sustancias que necesitan para estar en perfectas condiciones.
Es cierto que un enfermo de osteoporosis debe tener más cuidado a la hora de practicar deporte. Es importante que repare en la intensidad del ejercicio, ya que no debe ser demasiado alta, sobre todo los primeros meses de entrenamiento. No hay que olvidar que el riesgo de lesión en estas personas es mayor, por lo que hay que minimizar el impacto hasta que el hueso no se fortalezca para subir de nivel.
Debemos tener en cuenta que los ejercicios en los que la columna se flexione están prohibidos para los enfermos de osteoporosis por representar un importante riesgo para esta parte del cuerpo. Por el resto es importante que se realice ejercicio, aunque eso sí, siempre supervisado por un profesional que sepa guiar a estas personas en la práctica deportiva conveniente para su estado.
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