Aunque el TRX es un implemento que podemos utilizar tanto en interior como exterior, lo cierto es que en los meses de primavera y verano tiende a apetecer más usarlo en el exterior.
Lo bueno del TRX es que no necesitas mucho más que tu cuerpo y peso corporal para lograr un entrenamiento de cuerpo completo. En este artículo te explicamos una rutina HIIT para que la pongas en práctica durante agosto aprovechando el sol y el calor.
Diseño del entrenamiento
El entrenamiento interválico de alta intensidad se caracteriza por periodos cortos de esfuerzos a intensidades máximas seguidos de periodos de descanso de la misma duración o incluso menos, rara vez son más largos que los periodos de trabajo.
El TRX por su versatilidad nos permite usarlo como herramienta para lograr un entrenamiento HIIT eficiente.
Veamos un ejemplo de cómo podemos hacerlo.
Nuestro entrenamiento HIIT va a ser un EMOM de 10' que consta de lo siguiente:
- 13 sentadillas con salto en TRX
- 13 flexiones en TRX
- 13 remos en TRX
Un entrenamiento EMOM consiste en realizar los ejercicios y repeticiones que se indican dentro de cada minuto mientras dure el entrenamiento. Cuando terminas simplemente descansas el tiempo que quede hasta que vuelva a empezar el siguiente minuto.
De esta manera cuanto más rápido vayas, más tiempo te sobrará para descansar y menos riesgo correrás de acabar empalmando un minuto con el siguiente.
Sentadillas con salto
Las sentadillas con salto con TRX son más sencillas de realizar que sin el mismo. El propio TRX sostiene parte de nuestro peso corporal y por lo tanto solo tenemos que preocuparnos de empujar el suelo bajo nuestros pies y despegarnos de él.
Eso sí, procura hacer la mínima fuerza posible con los brazos puesto que lo que queremos es que sean los cuádriceps los que hagan el trabajo.
Flexiones
Las flexiones en TRX pueden ser muy duras o muy sencillas dependiendo de cuánto nos inclinemos hacia adelante, es decir, en función de lo paralelos al suelo que estemos.
Siéntete libre de modificar la posición de los pies para mayor o menor intensidad, eso sí, recuerda que los codos al bajar deben formar un ángulo aproximado de unos 45 grados.
Remos
Por último tenemos los remos donde al igual que las flexiones, la posición de los pies determinará la intensidad del ejercicio.
Cuanto más adelantemos los pies, más cerca del suelo estaremos y más difícil será el movimiento.
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Imágenes | Anastase Maragos en Unsplash, iStock
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