Las flexiones son uno de los ejercicios que más se realiza, ya que puedes hacerlo en cualquier parte, sea en casa, en la calle o en el gimnasio. Sin embargo, se suele cometer muchos errores a la hora de realizarlo.
En este artículo te vamos a mostrar los siete errores más comunes a la hora de hacer flexiones y como evitarlos para realizar tus ejercicios de forma más correcta.
No realizar todo el rango de movimiento
Uno de los errores que se comete, sobre todo si eres principiante, es no hacer la flexión con todo el rango de recorrido y movimiento. Y eso es esencial para obtener los beneficios musculares que te ofrece la flexión.
Es importante que te asegures de acercar el pecho hasta el suelo y extender los brazos por completo cuando subas. Este rango de recorrido es esencial para permitir una mayor activación de todos los músculos implicados.
No llegar al suelo con el pecho
Este error está muy relacionado con el anterior, implicando la cadera en este caso. Es frecuente observar que las personas permiten que las caderas se hundan durante el movimiento, lo que implica que lo primero que toca el suelo sea la cintura.
Mantener las caderas altas, tampoco es la mejor opción para realizar de forma correcta la flexión. Para corregir este error, lo importante es mantener la espalda baja en una posición neutra, asegurando que el pecho sea lo primero que toque el suelo.
La posición del cuello
La posición del cuello es primordial para evitar dolores de espalda, además de que podría obstaculizar el rango de movimiento, el primer error que deberíamos evitar.
Es por ello, que es importante mantener una línea recta desde la coronilla hasta los pies, manteniendo la espalda lo más recta posible y bajando todo tu cuerpo como si fuera un bloque.
La posición y distancia de las manos
Este es un error muy común cuando realizamos las flexiones, que es la distancia y la posición de las manos. Si bien es cierto que cada uno las colocará de manera diferente, ya que la longitud de los brazos es distinta, hay una manera que será mejor para ti.
Lo primero que debes saber es que los codos siempre deben estar justo encima de las muñecas, creando así una línea recta. Para saber cuál es tu apertura correcta, colócate boca abajo, y estira los brazos por encima de la cabeza.
Después, desliza los brazos hacia abajo hasta que tus codos formen un ángulos de 45-60 grados. Seguidamente, desliza los brazos hasta que tus manos estén debajo de los hombros y presiona el cuerpo hacia arriba.
Encoger los hombros
En cualquier tipo de ejercicio que no implique un encogimiento de los hombros, siempre debemos evitarlo, manteniendo los hombros lejos de las orejas.
Cuando encogemos los hombros al realizar las flexiones, perdemos estabilidad durante el ejercicio y permitimos que nuestros hombros dominen el ejercicio, aumentando el riesgo de lesionarnos.
Una mecánica de los omóplatos descuidada
Este es un error muy relacionado con el anterior, sobre todo si hablamos de estabilidad y dominio muscular. Es importante que los omóplatos estén colocados hacia atrás y hacia abajo.
Además, mantener el pecho frente a los deltoides te va a permitir desarrollar un pecho más grande a la hora de realizar la flexión.
Una incorrecta trayectoria del cuerpo
El último error y no menos importante es realizar una incorrecta trayectoria del cuerpo. Para que lo entiendas mejor, cuando se realiza una flexión es incorrecto realizar un movimiento ascendente y descendente, creando una línea recta hacia el suelo. Eso va a provocar que los codos no estén por encima de las muñecas y que el hombro sea el que haga la mayoría del trabajo.
Es por ello que el cuerpo debe hacer una trayectoria en dirección a tu cabeza, es un movimiento muy leve, pero te permitirá tener una mecánica adecuada cuando realices tus flexiones.
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