Adam Shere es un cardiólogo estadounidense de 35 años que ha transformado radicalmente su composición corporal. Su cambio físico vino determinado porque era un cardiólogo que no cumplía con lo que recomendaba, lo que suele cuando un médico te recomienda no fumar y lo ves encenderse un cigarrillo. A ello hay que sumar que se sentía siempre apático y fatigado. Como el resto de mortales, cada año se ponía el mismo propósito: hacer más ejercicio y comer mejor. Como el resto de los mortales, no lo cumplía. "Este año no", eso fue lo que se dijo a él mismo en el inicio de 2022, y esta vez sí lo cumplió.
"Este yo soy al comienzo de 2022": Adam Shere tenía claro que esta vez sí lograría su objetivo
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♬ Intro - The xx
En solo seis meses, Adam Shere estaba en la mejor forma de su vida gracias a la introducción de hábitos saludables en su vida. Dichos hábitos no eran otros que los que él mismo recomendaba a sus pacientes cuando lo visitaban en su consulta de cardiología.
- Limitar al máximo la comida basura y alimentos ultraprocesados
- Realizar entrenamiento de fuerza varios días a la semana
- Conseguir, sin falta, 10.000 pasos al día
- Buenos hábitos: hidratación, descanso y estrés controlado
Resultado espectacular después de un año de cambio físico
El resultado era el que cabía esperar cuando algo se hace de manera correcta, constante y paciente. La constancia es mucho más importante que la motivación, la genética o cualquier característica. De poco sirve hacer todo perfecto durante unos días, si no lo vamos a mantener el resto de nuestra vida.
Adam detalló en una entrevista para Insider que comenzó a introducir hábitos saludables en su vida, pero solamente aquellos que podía mantener. Nada de programas de entrenamiento y dietas estrictas. Pequeños cambios día a día y fijarlos poco a poco hace que el progreso sea constante y no haya picos de mejora y de abandono.
Como en el amor, llévate bien con la comida y el entrenamiento poco a poco
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♬ Good Vibes (Instrumental) - Ellen Once Again
Las dietas extremas no funcionan, nunca funcionaron y nunca funcionarán para obtener cambios saludables y duraderos. Nuestro cuerpo no es capaz de perder 10 kilos de grasa en 10 días, o cambiar drásticamente la composición corporal en 28 días, como venden muchos programas.
Si estás en un proceso de pérdida de peso, al igual que hace Adam, tómate un postre si realmente te apetece. Cuando restringimos todo, cualquier "fallo" nos hará sentirnos culpables y querer abandonar porque creemos que ya hemos fracasado.
Ten una relación saludable con los alimentos y deja espacio para una barbacoa con amigos, tomarte ese helado que tanto te gusta, o beberte esa copa de vino. Claramente esto es la excepción, no la norma, pero notarás que cada vez lo necesitas menos, como le ocurría al cardiólogo estadounidense.
Otra relación que debe ser de amor, y no de odio, es el gusto por el entrenamiento. La actividad favorita de Shere es el baile fitness al estilo Bollywood, y gracias a esa práctica fue poco a poco aumentando el tiempo que le dedicaba a otros ejercicios como el levantamiento de pesas, que a priori le gustaban menos.
Si unimos todo lo anterior, y le sumamos la mayor de todas las virtudes, la paciencia, puede que logremos perder 14 kilos en un año, como hizo Adam, o más importante aún, modificar nuestra composición corporal sin importar el número de la báscula. Este cambio es sostenible a lo largo de un año, ya que hablamos de perder poco más de un kilo por mes, que llevado al peso bajado por semana son unos 300 gramos de media.
Imágenes | Extractos de vídeo de Tikheartdoc (Tik Tok)