Arnold Schwarzenegger y Sylvester Stallone son dos de los culturistas y actores que han motivado a una generación completa a aumentar sus músculos en el gimnasio. Illia Yefimchyk, más conocido como Illia Golem o "el Mutante", fue uno de los que de niño quería parecerse a ellos, y lo hizo. El culturista checo había alcanzado un tamaño sobrenatural, pero ha fallecido a los 36 años por causas desconocidas a la hora de escribir este artículo.
Illia Golem o "el Mutante" ha fallecido a los 36 años de edad por causas aún desconocidas
El mundo del culturismo recibió ayer un nuevo varapalo cuando se oficializó la muerte de Illia Golem a la edad de 36 años. Fuentes cercanas confirman la muerte de Illia Golem, la bestia de 155 kilos, exponía la cuenta whoisthebestbb en Instagram, un perfil especializado en culturismo.
La plataforma especializada en culturistas Musculardevelopment le hizo una entrevista en la que él mismo revelaba algunos increíbles datos y explica que para tener ese tamaño y peso ingería 15.000 calorías.
El objetivo de 'El Mutante' era que todos le vieran así, como un monstruo del culturismo, y lo consiguió con sus 1,85 metros de alto y sus 155 kilos: "Vi películas como Terminator y Rambo”, recuerda, “y quería ser grande y musculoso como ellos. Quería ser Hulk, ser tan grande que todo el mundo lo notara".
Aunque no llegó a competir en el escenario de culturismo profesionalmente, era un culturista muy seguido. Illia perseguía constantemente superar los límites de la capacidad humana, llegando a ser conocido como 'el culturista más monstruoso del mundo'.
1988 - 2024: el culturista más monstruoso del mundo
Illy, como le conocían los más cercanos, se crio en la ex Unión Soviética, la República de Bielorrusia. Dio sus primeros pasos en el culturismo en el gimnasio de su ciudad con pocos conocimientos de cómo entrenar, pero con muchas ganas. Llegó incluso a pedirle a Papá Noel unos grandes bíceps por Navidad.
A los 19 años se mudó a Praga para estudiar economía, pero sabía que era cuestión de tiempo dejarlo y dedicarse al negocio de los gimnasios. Alquiló un local en la capital checa, puso el cartel con su nombre, Eagle Fitness y lo convirtió en una meca de culturistas y levantadores de pesas en Praga.
De la mano del crecimiento de su gimnasio comenzó a ganar peso y comer más y más para mantenerlo y seguir subiendo el número de la báscula. En un día normal llegaba a comer cuatro kilos de carne y una cantidad de arroz para alimentar a una familia grande al completo.
Lejos de pensar que para comer 15.000 tiraba de comida basura, El Mutante se alimentaba con alimentos "limpios", haciendo una comida trampa a la semana. Cambió el frío checo por el clima de Miami, donde también tenía más oportunidades para crecer y entrenar con la élite del culturismo en Estados Unidos.
Por desgracia, no es un caso aislado
El 11 de septiembre, Illia Yefimchyk fallecía por causas todavía desconocidas. Su nombre se suma a una larga lista de culturistas que han perdido la vida como el español Villano Fitness, la estrella Joesthetics, la figura Neil Currey o Christian Figueiredo con apenas 29 años, entre otros muchos.
No se puede asociar la muerte de Illia al consumo de esteroides o drogas porque la causa del fallecimiento no está esclarecida. Lo que sí está claro es que conseguir un volumen masivo se logra únicamente con el uso de ciertas sustancias poco saludables, a lo que hay que sumar la ingente cantidad de comida que somete al cuerpo a un estrés para el que el cuerpo no está preparado.
El año pasado se publicó un estudio en el que se mostraba el estado de la autopsia de culturistas que habían fallecido. Estas personas mostraban daños en el corazón y órganos como el riñón o el hígado. Todo el mundo tiene 'derecho a morir' por un sueño, pero hay que tener claro lo que nos estamos jugando cuando cruzamos la línea.
Reiteramos que no se conoce la causa de muerte de Illia Yefimchyk, así que no se puede asociar al uso de estas sustancias. Eso podrá hacerse, o no, cuando se conozcan los motivos de la pérdida de la vida del culturista. En cualquier caso, este fallecimiento se suma a esa larga y preocupante lista.
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Imágenes | Illia Yefimchyk (Instagram)
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