A todos nos traen de cabeza las calorías y más cuando queremos mantener el peso, ya que en la mayoría de los casos un exceso de ellas en nuestra dieta son la causa del aumento de peso progresivo, y es que debemos tener en cuenta el funcionamiento que tienen las calorías y saber como acabar con ellas y controlar no pasarnos demasiado.
Las calorías nos las facilitan todos los alimentos que consumimos. Son la cantidad de energía que éstos nos brindan y de la que el cuerpo se vale como combustible para desarrollar sus funciones. Si consumimos más cantidad de la que quemamos conseguiremos que el cuerpo almacene las sobrantes en forma de grasa, lo que nos hará ganar peso y volumen. Para evitarlo es importante controlar la ingesta de calorías y tener algunos puntos en cuenta.
Antes de nada debemos saber que es imprescindible realizar comidas en las que los aportes calóricos no sean demasiado elevados para así evitar añadir demasiada cantidad a nuestra dieta. Decantarnos por alimentos pobres en grasas saturadas, cereales integrales, frutas, verduras… puede ser una buena idea para conseguir un buen control sobre las calorías que incorporamos en nuestro organismo. Pero no todo es la ingesta de alimentos, sino que también tiene mucho que ver la actividad física que realizamos.
Un dato fundamental que no debemos pasar por alto es que las calorías no se utilizan directamente nada más comer los alimentos. Es decir, no todas las calorías que nos aporta un alimento se almacenan en el organismo o se aprovechan tal cual, ya que cuando digerimos el alimento parte de sus calorías las destinamos a su asimilación por parte del organismo. Lo mismo sucede con todos y cada uno de los actos que realizamos con el organismo, ya que para llevar a cabo todas nuestras funciones vitales necesitamos energía que obtenemos a partir de las calorías.
El cuerpo estando en reposo consume energía, pero no todos la consumimos de la misma manera, ya que depende mucho de la velocidad metabólica, por eso es importante que activemos el metabolismo, y el deporte es una buena forma de hacerlo. En este campo el entrenamiento con pesas juega un papel importante, ya que es la mejor manera de mantener los músculos tonificados y en tensión durante más tiempo, lo que nos va a llevar a un mayor consumo calórico estando en reposo.
Pero no solamente las pesas son una buena solución, sino que la práctica de ejercicio aeróbico es una buena idea para quemar calorías de forma rápida, ya que al activar la circulación sanguínea de nuestro cuerpo necesitaremos mucha más energía para poder hacer frente a ese esfuerzo. Con prácticas como la carrera, el spining, la bicicleta o el step conseguiremos eliminar muchas calorías que de sobrarnos pueden ser el germen de un sobrepeso.
Es importante que sepamos mantener un perfecto equilibrio entre la cantidad de calorías que consumimos y las que gastamos. Esta es la mejor manera de mantener una salud en buenas condiciones sin correr riesgos de aumentar nuestro peso muy rápidamente.
Imagen | ilco
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