Muchos de nosotros nos preguntamos habitualmente qué es lo más efectivo a la hora de entrenar nuestros músculos y el tipo de rutina que debemos seguir para conseguir nuestros objetivos. Es aquí donde entramos en un dilema que desde Vitónica intentaremos solucionar.
El tipo de entrenamiento a seguir tiene que depender de los resultados que queremos obtener. No es lo mismo buscar aumentar volumen muscular y crecer, que mantener nuestro estado actual e incluso definir nuestra musculatura. Para ambas decisiones hay algunos principios a tener en cuenta a la hora de entrenar y llevar a cabo nuestra rutina. Y es aquí dónde entramos en la eterna discusión de realizar un entrenamiento cualitativo o cuantitativo.
Muchos de nosotros solemos caer en el error de que cuantas más repeticiones llevemos a cabo de un grupo muscular más crecerá. Esto no es así, pues este tipo de entrenamiento lo que consigue es un desgaste mayor y una quema superior de calorías eliminando la grasa de ese músculo. Es una buena manera de mantener nuestra forma física e incluso de perder peso. Nunca conseguirlo.
Este tipo de entrenamiento en el que los ejercicios consisten en 4 o 5 series de 12 a 15 repeticiones con un peso bajo, son muy recomendables en personas que quieren mantener su estado físico, perder peso o todo aquel que quiera marcar los músculos después de periodos de crecimiento muscular. Este tipo de rutina desgasta más nuestros músculos, por lo que hay que tener especial cuidado en el peso que utilicemos, que debe ser escaso.
Por el contrario la otra alternativa a nuestro entrenamiento es seguir rutinas en las que la intensidad a la hora de entrenar el músculo sea la tónica predominante. Este tipo de rutina se centra en una concentración de fuerza en el músculo trabajado. Se lleva a cano por personas que quieren conseguir un crecimiento muscular y se desarrolla de la siguiente manera. Se realizan menos ejercicios por sesión de entrenamiento, y se ejecutan de 3 a 4 series de 10, 8, 6 y 6 repeticiones progresivamente con aumento de peso en cada serie.
Esta forma de entrenamiento es más intensiva y el músculo estará al límite con el constante aumento de peso, por lo que le obligaremos a desempeñar un esfuerzo extra que derivará en un futuro crecimiento. Es importante que entre serie y serie descansemos entorno a un minuto, pues el músculo debe estar siempre bien oxigenado si lo que queremos es crecer. Los ejercicios deben ser lentos y bien realizados concentrándonos en el músculo que estamos trabajando.
Ahora la decisión es de cada uno de nosotros, pues dependiendo de la forma física que queremos tener debemos elegir una u otra forma de entrenamiento muscular. Aunque lo ideal para tener un cuerpo armonioso es alternar épocas en las que el entrenamiento sea más intensivo, y otras en las que sea más ligero pero con un mayor número de repeticiones.
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