El ejercicio poco visto en el gimnasio que te ayudará a ganar masa muscular en los hombros

Los deltoides necesitan variabilidad para producir crecimiento muscular en todas sus zonas

Richard R B Sz9vkfkrc Unsplash
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Las elevaciones laterales son el movimiento principal con el que desarrollar las fibras de la zona media del deltoides. Este ejercicio se puede realizar de muchas formas, aunque todas parezcan la misma. Sin entrar a las opciones en polea y en máquina, si hacemos la versión con mancuernas lo cambiaremos todo si jugamos con la inclinación de nuestro cuerpo. En este artículo te mostramos una variante poco vista en las salas de pesas, pero muy interesante para ganar masa muscular en los hombros.

Variabilidad con las elevaciones laterales con mancuernas

En este artículo anterior de Vitónica detallamos de manera extensa por qué al inclinar nuestro tronco de manera lateral modificábamos el ejercicio. De esa forma, si en lugar de hacer las elevaciones de pie con mancuernas, nos reclinamos en un banco como en el vídeo siguiente, el punto de máxima tensión cambiará.

Cuanto más paralelo con respecto al suelo hagamos la elevación lateral, más nos costará al inicio del rango de movimiento y menos al final. Si lo hacemos completamente tumbados de lado en el suelo, será justo al inicio cuando más nos costará.

La biomecánica unida a la gravedad hace que el mismo ejercicio tenga puntos donde nos cuesta más muy diferentes. Muchas personas ya utilizan esta variabilidad en el gimnasio y entrenan con diferentes variantes, como la elevaciones laterales ligeramente inclinado que podemos ver en el vídeo siguiente.

Elevaciones laterales inclinados "hacia el otro lado"

Existe una variante menos vista en las salas de pesas, pero que también es muy interesante. Se asemeja a las elevaciones laterales reclinadas en un banco porque nos cuesta más al inicio que al final. Las elevaciones laterales que podríamos llamar "apoyado en la pared" o "apoyado en el cruce de poleas" consisten en dejarnos caer hacia el lado contrario de la mano que sostiene la mancuerna.

Con esta variante logramos dos cosas principalmente: nuestro cuerpo estará totalmente estable y variaremos el punto del ejercicio donde nos cuesta más. Cuando hacemos unas elevaciones laterales normales de pie con mancuernas, el punto donde nos cuesta más es cuando tenemos los brazos en forma de cruz, a unos 90º aproximadamente.

En esta variante ese punto llega antes, haciendo que la tensión sea diferente. Si buscamos lo contrario, que el punto donde nos cueste más sea por encima de los 90º, lo que tendremos que hacer es inclinarnos hacia el lado que tenemos la mancuerna, como hemos visto en el ejercicio anterior en el que nos agarrábamos al soporte de la polea.

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Imágenes | Richard R (Unsplash)

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