Todos sabemos que un exceso de azúcar no es aconsejable si queremos cuidar la salud del organismo, sin embargo, la población aun continúa superando la ingesta máxima recomendada por la OMS y poco se dimensiona acerca de las consecuencias de su consumo elevado, por ello, hoy os mostramos de qué hablamos cuando hablamos de azúcar.
Mayor riesgo de sufrir cáncer
Podríamos pensar que el azúcar es nocivo pero no como para generar cáncer, sin embargo no son pocos los estudios que vinculan su exceso con un mayor riesgo de desarrollar esta enfermedad degenerativa.
El azúcar puede afectar la salud de nuestras células al favorecer la glicación de proteínas que conforman sus membranas y el estrés oxidativo en el cuerpo tal como lo hace el tabaco, por ejemplo, lo cual a largo plazo, acompañado de un estilo de vida poco sano, puede ser la causa de un mayor riesgo de sufrir cáncer.
Hasta el momento, el exceso de azúcar se ha vinculado a mayor riesgo de cáncer de próstata, de vías biliares y de colon, pero por supuesto, puede trasladarse este efecto a otras partes del cuerpo y por ello, quizá el azúcar sufra el mismo destino que el tabaco.
Más probabilidades de desarrollar hipertensión
Siempre hemos creído que el enemigo número uno de una presión arterial normal era la sal, pero el azúcar en exceso puede ser en realidad, el principal culpable de la pandemia de hipertensión que vivimos hoy en día.
Al parecer, el azúcar reduce las concentraciones de óxido nítrico en el organismo generando así vasoconstricción y una elevación de la presión arterial, lo cual se traduce a largo plazo en un riesgo elevado de sufrir hipertensión y un riesgo tres veces superior de padecer enfermedades cardiovasculares.
Entonces, quizá es momento de mirar con otros ojos al azúcar tal como lo hemos hecho por años con la sal, pues es éste alimento el que puede ser el principal causante de hipertensión en la actualidad.
Alto riesgo de sobrepeso y obesidad
El azúcar no sólo aporta energía de fácil asimilación sino que además, los excesos se acumulan como grasa favoreciendo el enriquecimiento de "las reservas del organismo", de allí que a nuestro cuerpo le gusten tanto las cosas dulces o con azúcar y también, la respuesta que desencadena su consumo.
Dada sus características, el azúcar activa zonas cerebrales que producen placer y ello puede generar adicción de manera semejante a como lo haría el alcohol, lo cual nos incentiva a comer más y más pudiendo caer fácilmente en un exceso de calorías que promueva la ganancia de peso y el desarrollo de sobrepeso y obesidad.
Y no podemos dejar de recordar que una vez que tenemos obesidad, todo nuestro cuerpo se resiente pudiendo sufrir diferentes enfermedades y/o patologías a causa del exceso de grasa en el organismo.
Pérdida de memoria
No sólo sobre la salud física y orgánica tiene efectos el exceso de azúcar, sino que además, puede dañar funciones cerebrales y afectar la estructura de éste órgano tan importante para el cuerpo humano.
Así, un consumo elevado de azúcar en el tiempo se traduce en inferiores niveles de memoria en diferentes test y en alteraciones en la orientación espacial, a cargo del hipocampo, un área cerebral con valiosas funciones para el organismo.
De esta manera, el consumo excesivo de azúcar puede dañar nuestro cerebro y sus funciones, ocasionando desde una respuesta adictiva a su consumo hasta peor rendimiento cognitivo e intelectual a causa de una pérdida de memoria.
Deterioro de la salud dental
No es desconocido que el azúcar puede asociarse a mayor riesgo de sufrir caries o enfermedades periodontales, sin embargo, hoy el problema es mucho más acentuado debido a la gran cantidad de alimentos que, aunque no lo creamos, tienen exceso de azúcar en su interior. De hecho, en la actualidad es casi imposible hacer una compra sin azúcares añadidos y por supuesto, mucho más caro.
Por ello, las caries son otra enfermedad que predomina en la actualidad y desde edades muy tempranas, pues hasta los alimentos infantiles esconden gran cantidad de azúcar que difícilmente podemos identificar debido a los diferentes nombres que recibe el azúcar y que presenta en los etiquetados de alimentos.
Si bien la sacarosa o azúcar de mesa es el más cariogénico de todos, también otros tipos de azúcares son sustrato para las bacterias que producen caries en nuestra boca, por ello, es fundamental comenzar a identificar el azúcar en los alimentos que consumimos.
La industria del azúcar se ha convertido en un excelente negocio y por ello, muchas veces el consumidor resulta engañado, aunque no es solamente con el azúcar sino que con muchos otros productos podemos sufrir un engaño.
Cuando hablamos de azúcar no sólo hablamos de calorías, sino también, de muchas enfermedades que podemos sufrir a causa de su consumo elevado, por ello, una vez más, es importante comenzar a actuar para reducir su consumo, reemplazando alimentos procesados por ingredientes naturales y reeducando el paladar para que comencemos a disminuir el gusto por el azúcar e incrementar el gusto por los sabores originales de los alimentos.
Imagen | iStock
Ver 7 comentarios