La naturaleza y los productos que nos brinda son una fuente inagotable de alimentos ricos en nutrientes beneficiosos para la salud. Todos estos nutrientes los podemos encontrar en alimentos que provienen de fuentes naturales y que no deben faltar en nuestra dieta. En esta ocasión nos vamos a detener en un nutriente muy valorado y beneficioso, se trata del resveratrol, una sustancia que se encuentra en diferentes alimentos y que queremos dar a conocer, ya que puede sernos de gran ayuda a la hora de reforzar nuestra salud y el bienestar del organismo.
Este nutriente es relativamente nuevo, y es que a pesar de que existe desde siempre se descubrió en 1940, concretamente en la raíz de una planta llamada veratrum. A partir de este descubrimiento se empezaron a apreciar los beneficios que tiene en el organismo. Pero ya en los años setenta se descubrió que su presencia en las uvas era elevada, y que por eso esta fruta es muy beneficiosa para nuestro organismo. También en los noventa se vio que el vino lo contiene en altas cantidades, de ahí lo beneficioso que es su consumo moderado.
Antioxidante
Si nos detenemos en los beneficios que nos aporta vamos a comenzar en lo efectivo que es en la prevención del cáncer, y es que esta sustancia es un potente antioxidante celular y protector de las mismas. Sobre todo, hay que destacar su poder en la inhibición de los agentes negativos que afectan a las células. El resveratrol actúa directamente en el núcleo celular haciendo que sea más fuerte y resistente. Por esto también es una sustancia que contribuye en gran medida a evitar el envejecimiento celular, prolongando más la vida la vida de éstas y haciendo nuestra salud más duradera.
Preventivo
Precisamente este poder antioxidante del resveratrol es el que hace que sea muy beneficioso a la hora de prevenir enfermedades cardiacas, y es que el efecto protector celular que tiene es muy beneficioso a la hora de evitar que las arterias y el aparato circulatorio se resientan. Los efectos de esta sustancia en nuestro aparato circulatorio es muy bueno, ya que no solamente ayuda a hacerlo más fuerte, sino que servirá para eliminar y controlar mucho mejor el exceso de sustancias negativas como el colesterol malo y los triglicéridos, además de potenciar el bueno y ayudar así a fortalecer las paredes arteriales.
Este mismo efecto tiene el resveratrol en otros órganos del cuerpo como el hígado, concretamente en le prevención del hígado graso que aparece en casos de alcoholemia o una dieta elevada en grasas. El efecto que tiene esta sustancia es de fortalecer el hígado y evitar que se vea tan afectado por los agentes externos, aunque es cierto que la dieta tiene un papel importante, y por ello hay que controlarla en estos casos. En el caso del páncreas sucede los mismo, y es que el fortalecimiento celular que produce hace que evitemos la aparición de enfermedades como la pancreatitis.
Propiedades curativas
En los casos de artritis es una buena ayuda, y es que el resveratrol lo que hace es inhibir la segregación de líquidos por parte del organismo. Al llevar a cabo este efecto en el cuerpo los casos y episodios dolorosos de artritis se reducirán, pues éstos están producidos por la segregación de líquidos en las articulaciones que causan inflamación y dolor. El resveratrol además ayuda a fortalecer las articulaciones debido al fortalecimiento celular, haciendo que los episodios de dolor se reduzcan, además de evitar la degeneración que se produce en estos casos.
No debemos olvidar que al tratarse de un potente antioxidante es muy bueno a la hora de mantener una piel y unos tejidos en perfectas condiciones. Sobre todo hay que tener presente el efecto celular que tendrá, evitando la pérdida de colágeno y otras sustancias necesarias para mantener nuestra piel joven. El refuerzo celular que aportará el resveratrol nos ayudará a mantenernos en perfecto estado por más tiempo. Por todo esto es bueno que cuidemos la ingesta de este nutriente, aunque no debemos pasarnos en la dosis diaria.
Imagen | pittigliani2005
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