En la receta de hoy continuamos en nuestra búsqueda de recetas saludables y nutritivas que se adapten a las necesidades de todo el mundo. Estas tortitas son perfectas para dietas bajas en hidratos, sin gluten o para quienes simplemente busquen un desayuno o merienda rico en proteínas y con grasas saludables, un complemento perfecto para la actividad deportiva.
Combinando semillas de lino molidas y harina de almendra obtenemos una masa que liga muy bien a pesar de ser muy húmeda; podrían quedar también bien usando solo almendra molida o solo lino, como en la receta original que hemos adaptado. Si no te importa añadir algo más de hidratos, puedes probar a sustituir alguno de estos ingredientes por harina de almendra o harina de trigo sarraceno, o también proteína en polvo.
Para lograr la textura esponjosa necesitamos separar las yemas de las claras de los huevos, batiendo estas aparte con varillas hasta montarlas a punto de nieve suave. Con una batidora de varillas eléctrica el esfuerzo es mínimo, pero si no tienes, simplemente bate muy bien toda la masa. La textura no será la misma, pero quedarán ricas igualmente.
Separar las yemas de las claras, dejando estas en un recipiente pequeño pero hondo aparte. Mezclar en una jarra o bol mediano, preferiblemente con pico vertedor, las yemas, la mantequilla de cacahuete, el yogur o queso batido, la almendra, el lino molido, la levadura, la vainilla y la sal, hasta obtener una mezcla homogénea.
Batir con batidora de varillas las claras hasta casi montarlas a punto de nieve; al retirar las varillas deben dejar caer picos blandos. Incorporarlas a la masa principal poco a poco, mezclando con movimientos envolventes usando uan lengua pastelera a medida que se van echando a cucharadas. Si quedan restos de clara líquida en el bol, desecharlos.
Calentar a potencia media-alta una plancha o sartén antiadherente y engrasar con aceite de coco u otro vegetal. Bajar la potencia a media temperatura y cocinar las tortitas del tamaño deseado, usando un cucharón o vertiendo la masa directamente desde la jarra.
Esperar unos minutos a que salgan burbujas o se pueda deslizar por debajo una espátula fina antes de darles la vuelta y continuar uno o dos minuuos más la cocción por el otro lado. Retirar a un plato e ir cocinando el resto de la masa. Para mantener las tortitas calientes, ir tapándolas con papel de aluminio o un paño limpio.
Con qué acompañar las tortitas de almendra sin gluten
Lo ideal es servir estas tortitas bajas en hidratos recién hechas, aunque también están ricas una vez se han enfriado, a temperatura ambiente, o templadas un poco en el microondas. Para acompañarlas podemos añadir los ingredientes que más nos interesen para complementar nuestra dieta, desde un poco más de mantequilla de cacahuete hasta fruta fresca, yogur o queso fresco, sirope de dátiles casero, etc.
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