La salud mental sin duda es uno de los aspectos más preocupantes en la actualidad y por ello, la meditación ha cobrado gran valor en el último tiempo. Te mostramos cómo la meditación profunda mejora tu salud y bienestar, ayudando a mucho más que a relajarte.
En qué consiste la meditación profunda
Hablamos de meditación como una práctica en la cual el individuo entrena su mente para conectarse con sí mismo e inducir un modo de conciencia plena acerca de su cuerpo, sus pensamientos, emociones y demás.
La meditación puede incluir un amplio espectro de prácticas y pueden estar destinadas a promover la relajación y reducir el estrés así como también a construir energía, a desarrollar emociones positivas o bien, puede ser utilizado como parte de diferentes religiones, aunque la meditación no constituye una religión en sí misma.
En todos los casos, la meditación implica un esfuerzo interno para autorregular la mente y es considerada un tipo de medicina complementaria para cuerpo y mente, dados sus diferentes beneficios a nivel emocional, físico y mental.
Más que una técnica en sí misma, la meditación profunda constituye una práctica en la cual se busca un estado de conciencia plena que pretende eliminar todo tipo de distractores y acercarse al autocontrol del organismo.
Meditación profunda: mucho más que relajación
Con el objetivo de enfrentar el estrés y reducir síntomas de ansiedad, beneficiando la salud mental y emocional, muchas son las personas que meditan a diario.
Sin embargo, la meditación puede hacer mucho más por nuestro cuerpo que relajarnos por eso te mostramos cuáles son los beneficios comprobados por la ciencia:
Favorece la composición de la flora intestinal
Se sabe que nuestra salud mental, emocional y física están estrechamente relacionadas; por lo tanto la meditación puede obrar mediante su influencia en diferentes zonas del cerebro que estimulan un adecuado funcionamiento de nuestro metabolismo a nivel hormonal o endocrino.
Aunque esto ha sido poco estudiado, hay investigaciones que señalan que la meditación puede influir positivamente en la composición de nuestra flora intestinal, afectando de esta forma nuestra actividad metabólica y la salud en todos sus aspectos.
Por esta razón, también la meditación se usa para optimizar la salud digestiva más allá de beneficiar la salud mental.
Promueve una adecuada salud cardiovascular
Por ayudar a reducir el estrés y a conectarnos con nuestro cuerpo, influyendo de forma positiva en el metabolismo, la meditación puede ser un excelente recurso para mejorar la salud cardiovascular.
Un estudio pequeño así lo ha comprobado al analizar los efectos de la meditación con fines espirituales en pacientes con enfermedades cardiovasculares, que pueden mejorar considerablemente su salud con la práctica de meditación a largo plazo.
Mejora la estabilidad emocional y el rendimiento cognitivo
La meditación profunda que pretende conectarnos con nuestro propio cuerpo y alejar la influencia de factores externos y pensamientos negativos puede ser especialmente útil para mejorar la estabilidad emocional alejándonos de la depresión y también, optimizar el rendimiento cognitivo.
Esto puede ser especialmente valioso si se padece una enfermedad crónica que afecta nuestro estado mental y emocional, ya que los beneficios antes nombrados se han comprobado en personas con enfermedad de Parkinson.
Favorece el control del peso corporal y puede ayudar a adelgazar
Como hemos dicho, la meditación profunda pretende aprender a conectarnos con nuestro propio cuerpo, a relajarnos y también a mejorar el autocontrol.
Por todo esto, la meditación que ayuda a reducir los niveles de ansiedad y de estrés y puede mejorar el descanso nocturno, ha demostrado relacionarse con niveles más bajos de comportamientos alimentarios descontrolados o disfuncionales así como también, reduce las emociones negativas y por esta razón contribuye a la pérdida de peso o al mantenimiento de un peso corporal saludable.
El impacto de la meditación a nivel salud y bienestar
Claramente, la meditación puede tener muchos efectos positivos en nuestro cuerpo pero en todos ellos su impacto se asocia al autocontrol y al estado de conciencia plena que se favorece con su práctica.
La reducción del estrés y de síntomas de ansiedad son otros de los factores responsables de los muchos efectos positivos de la meditación profunda, aunque la literatura científica al respecto continúa siendo escasa y confusa, debido a la existencia de estudios de baja calidad o de pequeño tamaño.
Sin embargo, la meditación profunda puede beneficiar la salud, especialmente si se complementa con prácticas médicas convencionales como señalan algunos estudios, ayudando de esta forma a optimizar el efecto de diferentes tratamientos o prácticas preventivas.
Así, desde Vitónica recomendamos la práctica de una meditación profunda como recurso favorecedor de un estilo de vida saludable que sin duda puede proteger al organismo alejándonos de diferentes patologías, o ayudando en su control y tratamiento.
Como podemos ver, la meditación profunda es mucho más que relajación, pues puede mejorar nuestra salud y bienestar considerablemente si se acompaña de otros buenos hábitos.
En Vitónica | Mindfulness: la meditación de moda (pero con poco respaldo científico)
Imagen | Foto de portada: Léonard Cotte, foto 1: Daniel Mingook Kim, foto 2: Omid Armin, foto 3: Milan Popovic