Si hemos cumplido con nuestros propósitos de año nuevo, es más que probable que llevemos ya un mes cuidando más nuestra salud y nuestro peso, yendo al gimnasio, moviéndonos más y comiendo mejor. Con un poco de suerte, eso nos habrá hecho alcanzar un peso más saludable o, al menos, acercarnos a él.
Y ahora que estamos en este punto, ¿qué? Y es que tan importante como alcanzar un peso más sano es ser capaces de mantenernos. ¿Qué podemos hacer el resto del año para mantener el peso perdido? Estas son algunas de las claves avaladas por la ciencia.
Elegir alimentos saludables
Las estrategias para intentar mantener el peso perdido pueden ser muy diversas y variadas. Sin embargo, es importante saber cuáles son las más efectivas. Las investigaciones al respecto señalan que, de todas las estrategias o claves posibles para mantener el peso perdido, la más importante es la de escoger alimentos saludables.
Pero no solo se trataría de elegir los alimentos más sanos, sino de tener hábito de vida más sanos. Es decir, aquellas personas que eligen comer más sano, hacen deporte y mantienen un estilo de vida saludable, son los que más éxito tienen a la hora de mantener el peso perdido. En definitiva, hacer de la salud un hábito y no una actitud puntual con principio y fin.
Llevar cierto control de lo que comemos
Otro de los hechos diferenciales parece ser el de mantener un control en nuestra alimentación. Entre otras cosas, ponernos un objetivo calórico a consumir puede ser de gran ayuda. Para ello, tendremos que calcular nuestras necesidades calóricas en función de si intentamos perder peso o si intentamos mantenerlo.
Mantener en casa y a la vista alimentos saludables también ayuda. Entre otras cosas porque tendemos a comer lo que tenemos en casa y lo que vemos. Si en nuestra casa hay fruta y verduras, en vez de ultraprocesados y productos azucarados, eso es lo que comeremos en mayor medida. Tener un registro calórico también puede ser de ayuda.
Usar una comunicación positiva con nosotros mismos
A veces tan importante como lo que hacemos es lo que nos decimos a nosotros mismos. Cada uno de nosotros es, probablemente, su peor crítico. Sin embargo, las evidencias encuentran que tener un diálogo positivo con nuestra persona es de mucha más ayuda a la hora de mantener el peso perdido.
Entre otras cosas, el ser amables con nosotros mismos y entender que somos personas y a veces fallamos es importante. Además, practicar técnicas de relajación o de mindfulness también puede ser de ayuda.
Usar los logros pasados como motivador
Mantener la motivación una vez que hemos conseguido nuestro objetivo - estar más sanos o perder peso - puede no ser sencillo. Y más todavía cuando se trata de mantener este peso a largo plazo, teniendo que evitar numerosas tentaciones y, de alguna manera, enfrentarnos al ambiente obesogénico. Sin embargo, usar nuestros propios logros anteriores como motivador puede ser de gran ayuda.
Hemos llegado hasta aquí y lo hemos hecho solos, gracias a nuestra fuerza de voluntad y constancia. Todo ese esfuerzo y lo que hemos conseguido por nosotros mismos es el mejor motivador para seguir manteniéndonos firmes.
Aumentar nuestra actividad física
A la hora de mantener el peso perdido, es importante que mantengamos un equilibrio energético. Es decir, un balance entre las calorías que consumimos y las que gastamos. Teniendo en cuenta que, en nuestro ambiente actual, es difícil evitar el exceso de calorías. Por lo tanto, la opción más eficiente sería aumentar el gasto calórico que hacemos.
En Vitónica | Así puedes bajar de peso (y mantenerlo después): cómo funciona la teoría del set point o punto fijo
Imágenes |iStock