Si te has planteado alguna vez comenzar a practicar Yoga seguro que te han venido a la mente un montón de preguntas: ¿qué tipo de Yoga escojo? ¿En qué se diferencian unos tipos de otros? ¿Tendré que ser muy flexible para practicarlo? ¿Necesito ropa especial o accesorios?
En el siguiente vídeo resolvemos las dudas más frecuentes que solemos tener sobre el Yoga antes de comenzar a practicarlo para que podáis escoger la mejor opción para vosotros y comencéis con buen pie. ¡Dentro vídeo!
¿Cómo elijo el tipo de Yoga que más me conviene?
No existe un único Yoga "universal", sino que hay diferentes tipos con características distintas. ¿Qué tienen en común? Básicamente el trabajo de la respiración, de la fuerza muscular a través de nuestro peso corporal y la unión cuerpo-mente-espíritu; si bien desde que el Yoga se ha popularizado las nuevas tendencias viran más hacia el trabajo del cuerpo que hacia el espiritual.
Si la primera clase de Yoga no te convence, prueba diferentes tipos antes de descartarlo: es posible que encuentres una modalidad que te guste
Puedes informarte de las características básicas de los diferentes tipos de Yoga (te las contamos en el vídeo de arriba), pero lo mejor que puedes hacer antes de decantarte por un tipo concreto de Yoga es probar varios y con distintos profesores. Hay mucha gente que después de una clase, por ejemplo de Kundalini Yoga y sin probar ningún otro tipo más, ha decidido que no era lo suyo y ha pasado a otras disciplinas: siempre es mejor probar diferentes tipos por si alguno de ellos te va mejor que otro.
Si, por ejemplo, tu objetivo practicando Yoga es más físico que espiritual, es posible que el Vinyasa Flow o el Ashtanga Yoga sean más de tu agrado que otros tipos diferentes.
Lo mismo ocurre con el profesor: en este tipo de actividades cuerpo-mente, como pueden ser el Yoga o el Pilates, es importante encontrar un profesor con el que conectemos, al que entendamos bien y que nos ayude en nuestra práctica.
Los miedos más comunes antes de empezar a hacer Yoga
Si te estás planteando comenzar a practicar Yoga pero no terminas de animarte porque crees que no tienes la flexibilidad suficiente o que no vas a poder hacer ninguna de las posturas o asanas que se plantean en una clase, no tengas miedo. El Yoga es para todos, sin importar cuál sea tu estado físico, tu edad o tu flexibilidad.
En una clase de Yoga vas a trabajar diferentes capacidades físicas, como la fuerza o la flexibilidad, pero siempre desde tu nivel, y con la posibilidad de modificar las diferentes posturas o de utilizar accesorios para hacerlas más sencillas y accesibles para todo el mundo.
En una clase de Yoga, además, suele haber personas de todos los niveles, desde principiantes hasta experimentados, y cada uno está concentrado en su propia práctica. El Yoga es una disciplina que, además, necesita de un cierto grado de introspección, de centrarnos en nosotros mismos, en ese momento y en ese lugar. Los compañeros de clase no van a estar juzgándote porque te salga mejor o peor el perro boca abajo.
Sea cual sea tu objetivo o el tipo de Yoga que elijas practicar, lo más importante es que tú te encuentres cómodo en la clase y que disfrutes de la práctica: que integres el Yoga en tu vida diaria para moverte más y mejor, y que disfrutes del camino.
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