A petición de nuestro lector y amigo José Manuel, vamos a hablar brevemente de las sobrecargas de gemelo, una de las lesiones (aúnque pequeñas) más habituales en deportistas aficionados (al igual que la pubalgia).
¿Qué es una sobrecarga? Tras la exposición a un periodo extenso de actividad física (sea deporte, trabajo...) varios músculos, normalmente los de naturaleza tónica (como pueden ser gemelos e isquiotibiales) tienden a una sobreexcitación de los mismos si cumplen alguno de las siguientes pautas:
<li>Desalineación de las articulaciones del tobillo y rodilla por otras lesiones anteriores o mala higiene postural (en el caso del gemelo, cargar mucho peso sobre las puntas de los pies).</li>
<li>Problemas circulatorios</li>
<li>Trastornos de los pies en el apoyo plantar</li>
<li>Problemas de calzado (camareras con largas jornadas laborales en tacones, deportistas con deportivas en mal estado, étc.).</li>
Por lo que, en caso de que tengas algún tipo de sobrecarga en gemelos, lo primero que debes hacer es analizar si alguna de las anteriormente citadas causas pueden ser el motivo en tu caso particular.
El tratamiento de recuperación se basará, simplemente, en un descanso moderado de unos días hasta aliviar los síntomas de la sobrecarga para pasar de inmediato a solucionar el problema causante de dicha molestia. Además, como método de prevención, recomendamos una vez más realizar sesiones de estiramientos completas y efectivas, así como, si eres practicante habitual de deportes de fondo, contar con el apoyo de un fisioterapeuta o masajista experto. Si el dolor es excesivo o muy prolongado permaneciendo en reposo es muy posible que confundamos la lesión con otra, por lo que insistimos en la necesidad de rodearse de buenos profesionales.