Las televisiones, las tabletas o los teléfonos móviles ya forman parte imprescindible de nuestra vida y, tanto es así, que la mayoría de vosotros ya no podéis imaginar vivir sin ellos. Pues lo mismo les ha pasado a nuestros pequeños, y es que el 70% de los niños españoles comen mientras ven la tele o manipulan algunos de estos objetos. Pero ¿cómo afecta esto?
Además de este dato, recogido en el V Estudio CinfaSalud sobre percepción y hábitos de salud de las familias españolas sobre nutrición infantil, la percepción de los padres respecto al peso de sus hijos dista mucho de la realidad, ¿cómo os quedáis?
Solo el 37,3% de los padres y madres españoles come habitualmente con sus hijos e hijas
Unos padres comiendo con sus hijos, sin hablar y viendo la tele o con el móvil en la mano, parece ser que ya es la instantánea característica de una comida en familia española y eso, si con suerte, está toda la familia. Atrás quedan las conversaciones de cómo ha ido el cole o el trabajo, ahora la tecnología nos abarca individualmente hasta en la mesa.
El problema de esto viene cuando arrastra consecuencias poco saludables. Y es que según concluye la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (Sepeap), este tipo de hábitos hace que los menores tengan una mayor predisposición a sufrir problemas de sobrepeso u obesidad.
"El teléfono móvil, la televisión y cualquier tipo de pantalla táctil deben aparcarse durante la comida, porque impiden disfrutar de las texturas y sabores de los alimentos. Además, no permiten la conversación familiar y anulan cualquier posibilidad por parte de los progenitores de inculcar a sus hijos e hijas hábitos saludables a la mesa, que les ayuden a prevenir el sobrepeso y la obesidad o enfermedades crónicas de base nutricional en la infancia como la diabetes o la hipertensión"- Cristobal Coronel, miembro de la SEPEAP.
El dato más curioso...
Según un cuestionario "on line" llevado a cabo por este grupo de trabajo, en más de 3000 padres españoles con hijos de entre 6 y 12 años, en más del 40% de los casos los propios padres no tienen una percepción real del peso de sus hijos y el 13% de los encuestados, no son conscientes de que sufren un problema de sobrepeso u obesidad.
El 13% de los padres no es consciente del sobrepeso de su hijo
Unos datos que a mi, personalmente, me han sorprendido realmente. Lo que queda claro es que, en un gran número de hogares españoles (no en todos por supuesto), los progenitores deben ser más conscientes de las necesidades reales de sus hijos y tratar de inculcar unos hábitos de vida bastante más saludables.
Vía | estudio cinfasalud
Imágenes | infográfico cinfasalud, estudio cinfosalud
En Vitónica | Cada hora frente a la televisión incrementa el riesgo de diabetes en un 3,4%
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mary00
Sinceramente me parece algo atroz dejar que los niños coman delante de una pantalla. Tal vez lo veo así porque, a pesar de que soy consciente de que las nuevas tecnologías son la protagonistas en nuestras vidas,creo ,y así trato de inculcárselo a mis hijos , hay tiempo para todo y que hay que hacer "cada cosa cuando toca", no hay más. Cuando se come ,se come, cuando se juega con la tableta o el ordenador, se juega y cuando hay que hacer deporte, se hace deporte.Sí se les enseña desde pequeños lo asumen como tal y no hay mayor problema, creo yo...
De todas formas, me cuesta mucho ver la relación que pueda tener ver la tele o jugar con la tableta mientras se come , con la obesidad...me parecen conceptos que no tiene por qué estar unidos...Sólo le veo sentido por el sedentarismo que implica estar todo el tiempo jugando con "esas máquinas infernales" jiji y no dedicarle tiempo al deporte..
Ayo
Aquí se abarcan varios temas.
En primer lugar, siempre la hora de la comida ha sido ese punto de referencia donde tanto padres, hijos y la unidad familiar en general tienen tiempo de sociabilizar entre ellos. Muchos no encuentran otro momento durante el día, asi que es un momento óptimo para continuar con la educación de tus hijos y conocerlos mejor (ambiente relajado mientras se come).
Por otro lado, nos encontramos los malos hábitos. No creo que tenga que estar relacionado. Yo de pequeño veíamos de vez en cuando la tele para cenar todos juntos, coincidiendo con las noticias y comentándolas, pareciéndome algo muy instructivo. Sin embargo, no soy partidario de tener una televisión en la cocina, porque es entrar y automáticamente uno la enciende.
Y por último, ya referido a la dieta y la no percepción de muchos padres de los problemas nutricionales de sus propios hijos, si bien tenemos algo de culpa los educadores y sanitarios (docencia para luchar contra la ignorancia); muchos padres en España carecen de los recursos, muchas veces de tiempo, para que sus hijos coman sano. Ni loco llevaría yo a mis hijos a un McDonalds a comer, eso ya lo harán con sus amigos de vez en cuando. Normalizar la comida basura es un error garrafal, y mira... ¿Qué es lo que veo siempre que voy a un centro comercial, sea cual sea el día? A decenas de familias atiborrándose. ¿Qué rico, no?¡Qué triste"