La hipertensión, tener la tensión alta, es uno de los problemas de salud más comunes hoy en día, muy difícil de controlar y además es factor de riesgo de muchas otras enfermedades.
Resulta curioso que siendo así tengamos tanto poder para controlar su aparición. Algunos de sus principales factores de riesgo podemos controlaros con facilidad y de ellos precisamente es de lo que vamos a hablar hoy:
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La obesidad: cuando tenemos sobrepeso nuestro corazón tiene que realizar un esfuerzo mayor para que la sangre viaje a todo nuestro cuerpo
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Tener el colesterol elevado hace que las arterias se obstruyan por lo que la circulación se dificulta subiendo la tensión
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Cuando sufrimos estrés nuestro cuerpo libera diferentes hormonas, algunas de ellas dificultan la presión sanguínea
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El tabaco ejerce acción vasoconstrictora, lo que hace que el corazón tenga también que realizar un mayor esfuerzo para bombear la sangre
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Lo mismo pasa cuando consumimos una excesiva cantidad de alcohol
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El sedentarismo es también causa de la hipertensión. El ejercicio mejora la función cardiaca y la salud de las arterias.
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El exceso de sal favorece la retención de líquidos, lo que hace que el corazón tenga qu bombear con más fuerza.
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Padecer diabetes, otra enfermedad que como sabemos tiene un alto componente evitable, hace que tengamos problemas en la circulación periférica
Como veis todas estas causas de hipertensión son evitables con un estilo de vida saludable y aunque existen otros factores determinantes lo cierto es que evitando estos conseguiremos tener muchas menos posibilidades de que esta enfermedad no aparezca.
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