Comienza el mes de junio y desde Vitónica os traemos un nuevo propósito para implementar durante estos próximos treinta días, como ya hemos hecho en meses anteriores. Junio es un mes repleto de exámenes para los estudiantes, de trabajo extra que dejar preparado antes de las vacaciones y de estrés por la mal llamada "operación bikini", así que creemos que unos minutos de relax diarios nos vendrán a todos fenomenal.
Por eso nuestro propósito para el mes de junio es el de dedicar al menos diez minutos diarios a nosotros mismos para relajarnos. No se trata de meditar (si no quieres, claro), sino de hacer hueco en nuestra agenda del día para tener unos minutos para nosotros. Te explicamos cómo hacerlo y te dejamos algunas sugerencias para que te relajes.
¿Cómo encontrar tiempo para relajarte?
Normalmente en nuestro día a día vamos a mil por hora: muchas veces juramos que necesitamos días de 48 horas para que nos dé tiempo a hacer todo lo que queremos. Trabajo, desplazamientos, tareas domésticas, entrenamiento, familia, amigos... Parece que todo tiene un sitio preferente en nuestra agenda y nos es difícil encontrar un rato para dedicarnos a nosotros mismos.
Para encontrar ese tiempo tan necesario para relajarnos, te proponemos que trates esos diez minutos diarios dedicados solo a ti como una reunión más en tu agenda: algo que es importante y que no puedes posponer. Si así es como tratas a tus citas de trabajo, ¿por qué no hacerlo para dedicarte tiempo a ti mismo?
Saca tu agenda y reserva un espacio de tiempo (nosotros te proponemos diez minutos al día, pero puedes modificarlo en función de tus necesidades) para dedicarlo a relajarte. Puede ser por la mañana, nada más despertarte (así te será más difícil saltártelo) o bien por la noche, antes de irte a dormir. Reserva ese espacio de tiempo y no lo elimines ni lo pospongas.
¿Qué puedes hacer para relajarte?
A muchas personas les viene genial hacer una pequeña secuencia de Yoga acompañada de unos minutos de meditación: mantenernos en silencio, ser conscientes del aquí y el ahora, puede ser una forma genial de dejar de lado todo lo que nos preocupa en el día a día y que ya tiene su espacio marcado.
Quizás la meditación no te llama mucho, pero existen otras formas de relajarte, por ejemplo haciendo algo creativo. Desde hace unos años se ha extendido la moda de dibujar a mano para deshacernos del estrés: así, el zentangle y los mandalas han ganado muchos adeptos como método de relax, al alejarnos del medio digital y al ayudarnos a mantenernos centrados en el momento presente.
Escuchar música también puede ser una buena ayuda a la hora de relajarnos, sobre todo si esos diez minutos diarios de los que hablamos los reservamos en nuestra agenda al final del día. Tener preparada una playlist de música relajante y escucharla durante unos minutos mientras realizamos unos estiramientos para desentumecer nuestros músculos puede ser una buena rutina antes de meternos en la cama.
También podemos optar por dedicar esos diez minutos diarios a trabajar nuestra respiración: hace unos meses os hablábamos sobre cómo aprender a realizar una respiración completa combinando los tres tipos de respiración que podemos ejecutar. El hecho de centrarnos en cómo se mueve el aire dentro de nuestro cuerpo nos ayudará a relajarnos y a no pensar en las tareas por hacer o en nuestra agenda para el día siguiente.
Seguro que puedes encontrar diez minutos al día para dedicarlos a ti mismo y a tu bienestar, ¿a qué dedicarías ese tiempo que guardas para ti?
Imágenes | iStock
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