Seguramente uno de los alimentos sobre los que existe más desinformación y más mitos circulando por la red sea la fruta: titulares como que no se puede comer cuando estás a dieta, que hay frutas que engordan y otras que no, que un zumo es equivalente a una pieza de fruta entera... ¿Qué es lo que nos podemos o lo que no nos tenemos que creer?
Para despejar todas las dudas, hemos resumido en el siguiente vídeo los mitos más escuchados sobre el consumo de fruta y te contamos cuál es la verdad sobre ellos, ¡dentro vídeo!
Cualquier fruta, a cualquier hora
A pesar de que en algunos medios podemos leer que "ciertas frutas no pueden comerse por la noche" o que "por la noche unas frutas engordan más que otras", lo cierto es que la fruta puede ser una opción saludable a cualquier hora del día. Cualquier fruta, a cualquier hora.
También en la última comida del día, la fruta sigue siendo una opción saludable. Consumirla a bocados, con toda su fibra, evita que se proudzcan picos de glucosa gracias a su absorción más lenta.
No se trata solo de lo que comemos, sino también de lo que dejamos de comer: elegir fruta como postre puede ayudarnos a desplazar otras opciones menos saludables y ricas en azúcares añadidos y en grasas de mala calidad.
Pero, ¿cuál es la mejor manera de comer fruta?
A mucha gente le cuesta horrores comer frutas y buscan la forma más apetecible o sencilla para ellos. Vaya por delante que comer fruta, en cualquiera que sea la forma, es mejor que no comerla: como hemos dicho anteriormente, va a desplazar otras opciones menos saludables y siempre va a aportarnos nutrientes importantes para nuestra salud como las vitaminas.
Ahora bien, dentro de las distintas maneras de comer fruta, ¿cuál sería la más beneficiosa para nuestra salud? La mejor forma de comerla siempre será a bocados, limpiándola previamente o pelándola si fuera necesario. De esta manera nos aseguramos de comer el alimentos sin procesar, con toda su fibra y todas sus vitaminas.
Además, al comer la fruta a bocados nos aseguramos de tener que masticarla: la masticación forma parte del proceso de la digestión de los alimentos y nos aporta una mayor saciedad que si la tomamos en forma de smoothie o de zumo.
El smoothie sería la segunda mejor manera de comer fruta: procesamos los alimentos al pasarlos por la licuadora, pero mantenemos todo su aporte de fibra, por lo que contribuye a una mayor saciedad. Los smoothies, además, suelen componerse de alimentos saludables en su totalidad que nos pueden ayudar a conseguir un plato completo con grasas saludables (como las que provienen de los frutos secos) y multitud de micronutrientes.
De las tres maneras en las que consumimos fruta, el zumo estaría en último lugar: al preparar un zumo, aunque sea de forma casera, estamos eliminando la fibra de la fruta, aunque sí conservamos sus micronutrientes, y no nos aporta saciedad, ya que eliminamos la parte de la masticación.
A la hora de elegir, la fruta mejor a bocados y, si es posible, local y de temporada, ya que esto nos ayudará a abaratar la cesta de la compra y a encontrar fruta en su punto óptimo de maduración.
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