Las flexiones son un ejercicio que puede llevarse a cabo utilizando únicamente el peso corporal, además de que son muy versátiles y se pueden llevar a cabo de muchas maneras distintas.
De todos modos, si llevas un tiempo haciéndolas seguramente ya las domines lo suficiente como para añadir intensidad, dado que en muchos casos será más interesante hacer esto en vez de seguir aumentando hasta la saciedad la cantidad de repeticiones que haces en cada serie.
Siete formas de aumentar la intensidad de tus flexiones
1. Trabaja con carga en la espalda
Evidentemente, si quieres aumentar la intensidad de un ejercicio de peso corporal lo más sencillo es añadir una carga externa que dificulte el movimiento.
Si colocas algún objeto relativamente pesado sobre la zona media de tu espalda te darás cuenta enseguida de que la intensidad aumenta significativamente, pero recuerda incluir el peso de modo que puedas trabajar con seguridad.
2. Añade una banda elástica
Si añades una goma o una banda elástica a tus flexiones verás que sobre todo la fase más alta del movimiento (que es el punto en el que más estirada estará la goma) se te empieza a resistir bastante.
3. Declínate
Otra forma de aumentar la dificultad del ejercicio es apoyando los pies sobre una superficie elevada de manera que te quedes en una posición declinada.
Haciendo esto reducirás algo la implicación del pectoral y aumentarás la del deltoides, pero te servirá como variante del ejercicio y te servirá para darle algo más de volumen a este músculo.
4. Haz el rango de movimiento completo
Sí, aunque este consejo suena algo redundante todavía hay personas que no llevan a cabo el rango de movimiento completo cuando hacen flexiones a pesar de que su movilidad y su seguridad no esté comprometida.
En una flexión deberías intentar que el pecho roce el suelo en el punto más bajo, y deberías buscar incluso una ligera antepulsión de la escápula en el punto más alto pero siempre sin que te duela el hombro.
5. Ralentiza la fase excéntrica
Si simplemente te dejas caer hacia el suelo cuando estás en el punto más alto de una flexión te estás perdiendo una gran parte del ejercicio.
En su lugar, resiste la caída poco a poco para que tu pectoral pueda seguir bajo tensión y de esta manera consigas más resultados a nivel de desarrollo muscular y ganancia de fuerza.
6. Resta apoyos
Otra manera de aumentar la intensidad de tus flexiones es simplemente levantar uno de los pies sobre los que te apoyas, de modo que te vuelvas menos estable y requieras de un aumento en la implicación de los músculos del core.
7. Prueba variantes más intensas
Si todo lo anterior no te funciona, lo que puedes hacer es buscar otras formas de llevar a cabo tus flexiones que te permitan reclutar mejor la musculatura o que sean más difíciles de por sí.
Puedes probar con las flexiones tipo hindú, tipo diamante, de arquero, con despegue... Hay muchas variedades que podrán ayudarte a seguir mejorando.
En Vitónica | Entrena tus pectorales en tu salón: ocho variantes de las flexiones que puedes hacer en casa sin material
En Vitónica | Un circuito de entrenamiento con gomas elásticas para entrenar tu tren superior en casa
Imágenes | iStock
Vídeo | The Fit Club, en YouTube