Muchas son las personas que con los años dejan de moverse y pasan de deportistas a sedentarios. Esto representa un grave error, pues el ejercicio resulta el mejor recurso para reducir los efectos del envejecimiento en tu cuerpo.
Moverse siempre para envejecer menos
A partir de los 30 años la capacidad aeróbica comienza a reducirse, a partir de los 40 años perdemos masa y fuerza muscular y también, flexibilidad así como ganamos grasa.
No obstante, el ejercicio es el recurso más eficaz para minimizar todos estos cambios y mantener el cuerpo en forma, saludable.
Según un estudio publicado en la revista Circulation en el cual se evaluaron cinco hombres voluntarios durante 30 años, el entrenamiento al cabo de seis meses fue capaz de revertir en su totalidad la reducción de la capacidad aeróbica ajustada por edad y masa corporal.
Asimismo, una investigación señala que la edad no limita la respuesta al entrenamiento en cuanto a fuerza muscular o hipertrofia, por lo que, la reducción de masa muscular con el paso del tiempo se debe casi exclusivamente al no uso de fibras musculares o lo que es igual, a que nos movemos menos cuando envejecemos.
Algo similar sucede con la flexibilidad, pues moverse es suficiente para ganar elasticidad e incrementar el rango de movilidad de las articulaciones.
Como si fuera poco, la pérdida de densidad ósea vinculada a la edad también podría revertirse o reducirse con el entrenamiento, lo cual demuestra que el ejercicio es el mejor recurso para reducir los efectos del envejecimiento en nuestro cuerpo.
No debemos olvidar que la edad no es un limitante y que podemos ganar mucho y envejecer menos si seguimos activos cuando superamos los 40, 50, o 60 años.
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