Nuestra alimentación es uno de los pilares fundamentales para que podamos presentar un buen estado de salud, esta es una conclusión unánime en el mundo médico y científico. De una alimentación inadecuada derivan muchos de los problemas de salud que se sufren hoy en día, uno de ellos es el hígado graso.
Una dieta en la que se contempla un consumo habitual y excesivo de grasas o el exceso de consumo de hidratos de carbono, puede originar el problema hepático también denominado esteatosis hepática.
El hígado graso o esteatosis hepática es una enfermedad sufrida principalmente por las personas con sobrepeso u obesidad, la edad también es un factor significativo, ya que la mayoría de los afectados suelen haber superado los 45 años. La persona que sufre esta dolencia suele tener una molestia constante en la zona donde se ubica el hígado, en algunos casos además se sufre hinchazón en esa zona ya que el hígado aumenta de volumen. Otro dato asociado a esta enfermedad son los altos niveles de colesterol o azúcar que se presenta en la sangre.
Intentar prevenir esta enfermedad es sencillo, basta con que nuestro estilo de vida sea el más adecuado y saludable. Nuestra alimentación debe ser rica en frutas y verduras, debemos desechar aquellos productos que presenten grasas saturadas de origen vegetal o animal, el ejercicio físico debe ser una tónica habitual y por supuesto olvidarse de todos aquellos productos nocivos y contaminantes para nuestro organismo como puede ser el tabaco.
Este es el mejor modo de evitar la esteatosis hepática, aunque también lograremos evitar cientos de enfermedades que se encuentran asociadas a nuestros hábitos de vida. Evitar todas ellas con una par de buenas costumbres es muy sencillo, come bien y practica ejercicio.
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