Ni correr ni meditar: esta es la mejor actividad para tu memoria, según la Universidad de Harvard

Puede tener un efecto neuroprotector y reducir el riesgo de demencia

Pexels Tamar Willoughby 346256 951886
Sin comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

El ejercicio físico regular puede tener grandes beneficios en nuestra salud mental y emocional, impulsando entre otras cosas funciones cerebrales diversas. Sin embargo, te mostramos cuál es la mejor actividad para tu memoria, según la Universidad de Harvard.

La memoria es la capacidad de nuestro cerebro que nos permite almacenar  información y recuerdos, y recuperarlos cuando sea necesario. Involucra una gran cantidad de subprocesos en los cuales la actividad física puede tener gran influencia.

En este sentido, debemos tener en cuenta que la actividad física moderada tiene  un efecto neuroprotector en el cerebro. Sin embargo, según la Universidad de Harvard, hay un ejercicio concreto que puede ser especialmente útil para preservar  esta función cognitiva.

Caminar para una memoria privilegiada

Según la prestigiosa Universidad de Harvard, cuantos más pasos damos al día menos riesgo tenemos de sufrir demencia, ya que los estudios así lo demuestran al confirmar que andar al menos 3800 pasos cada día se relaciona con una menor probabilidad de tener un deterioro cognitivo.

Por otro lado, también hay investigaciones citadas por la Universidad de Harvard que indican que una caminata lenta e inestable podría indicar problemas de memoria y decir más de lo que pensamos de nuestra función cerebral.

Pexels Panditwiguna 1149923

De hecho, el ritmo o la velocidad a la que caminamos está relacionado con la  velocidad de procesamiento de información y también con nuestra función ejecutiva, que son los procesos mentales que usamos para planificar y  organizar.

Por otro lado, la velocidad de la marcha ha demostrado volverse significativamente más lenta a medida que el deterioro mental se vuelve más severo, por lo que  caminar a una velocidad considerable y de manera estable puede demostrar  que nuestro cerebro se encuentra joven y funcional.

De hecho, los cambios en la forma de caminar o en la velocidad a la que  caminamos puede ser un signo de alerta sobre nuestra función cognitiva, ya que si uno pierde la estabilidad al caminar puede estar comenzando a experimentar síntomas de demencia y en estos casos, vale la pena consultar con un neurólogo.

Asimismo, caminar hacia atrás puede impulsar nuestra memoria a corto plazo, como lo señala la Universidad de Harvard; es por eso que si buscamos ante todo preservar esta función cognitiva y mantener el  cerebro en condiciones así como retrasar o reducir al máximo el riesgo de demencia, caminar es la actividad más beneficiosa que podemos poner en práctica cada día.

En Vitónica | Este menú será el mejor combustible para tu memoria, según los expertos de Harvard

Imagen | Foto de portada: Tamar Willoughby y foto 1: Agung Pandit Wiguna.

Inicio